La tormenta Iota se fortaleció este domingo a huracán categoría 1 mientras avanzaba lentamente por el Caribe hacia Centroamérica, donde las autoridades comenzaron a evacuar a la población para minimizar los daños, en una región aún devastada por el paso del ciclón Eta.
Las proyecciones del Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos indican que Iota podría tocar tierra el lunes por la tarde en el litoral Caribe entre Nicaragua y Honduras, siguiendo un rumbo similar al de Eta, que a inicios de este mes dejó más de 200 muertos y 2,5 millones de afectados por inundaciones y deslaves.
El NHC anticipó que Iota podría llegar a convertirse en un potente huracán categoría 4, similar al anterior ciclón.
En Bilwi, una ciudad del Caribe Norte nicaragüense de más de 40.000 habitantes, en su mayoría indígenas miskitos y afrodescendientes, la gente intentaba asegurar los techos de sus endebles casas de madera con las mismas láminas de zinc viejas y rotas que se desprendieron con el paso de Eta, y guardaban sus pertenencias en bolsas para protegerlas de las lluvias.
“Estamos consternados, nerviosos, psicológicamente no estamos bien porque perder nuestras cosas y volver a empezar no es fácil, algunos tenemos la casa viejita y corremos el riesgo de perderlo todo”, declaró a la AFP Silvania Zamora, habitante de Bilwi.
Las autoridades buscaron desalojar a los habitantes, pero muchos se niegan a ir a los albergues por temor a contagiarse de covid-19.
“Algunos preferimos quedarnos y morir en nuestras casas. Nunca antes había habido un huracán que se repitiera en tan poco tiempo, pero ¿qué podemos hacer contra la fuerza de Dios y la naturaleza?”, lamentó Zamora.
Numerosos camiones de carga privada y del gobierno se dirigían este domingo a Bilwi, provocando grandes filas para atravesar el río Wawa, cuyo cruce se hace en barcazas, lo que dificultó el traslado de ayuda a la zona.
Potencialmente catastrófico
“Se espera que Iota continúe fortaleciéndose rápidamente hasta convertirse en un peligroso huracán categoría 4 cuando se acerque el lunes a las costas centroamericanas”, advirtió el NHC este domingo en un informe.
El centro estadounidense agregó que las fuertes lluvias provocadas por el ciclón podrían causar inundaciones repentinas y crecidas de ríos en Centroamérica y el norte de Colombia.
“Inundaciones y deslaves en Honduras y Nicaragua podrían verse exacerbados por los recientes efectos del huracán Eta, resultando en impactos de significativos a potencialmente catastróficos”, advirtió el NHC.
En Honduras, policías y militares desalojaban en lanchas y helicópteros, por segundo día consecutivo, a decenas de miles de pobladores en el valle de Sula, en las proximidades de San Pedro Sula, la segunda ciudad del país, 180 km al norte de Tegucigalpa, ante inminentes inundaciones.
La Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) alertó en un comunicado que la cercanía de Iota “incrementa el riesgo de inundación y deslizamientos sobre todo en las zonas que fueron impactadas por Eta”, que sorprendió a los pobladores con las crecidas de los caudalosos ríos Ulúa, Chamelecón y Humuya y una rede afluentes menores.
Guatemala, que sufrió mortales deslaves con el paso de Eta, aguarda fuertes lluvias a partir del próximo martes, especialmente en las provincias de Petén, Alta Verapaz, Baja Verapaz (norte), Izabal (noreste), Huehuetenango, Quiché (oeste), Chiquimula, Zacapa, Jutiapa (este), Santa Rosa, Escuintla (sur) y el central Guatemala donde se ubica la capital, la mayoría aún con estragos ocasionados por el anterior ciclón.
En tanto, El Salvador declaró alerta amarilla (peligro intermedio), con la recomendación de adoptar inmediatamente todas las medidas de protección posibles, según el ministro de Gobernación, Mario Durán.
AFP