El escolta James Harden fue multado por la NBA con 50.000 dólares por no seguir los protocolos de seguridad de la Covid-19.
El partido inaugural de la nueva temporada que los Rockets debían jugar en su campo del Toyota Center frente a los Thunder de Oklahoma City fue suspendido debido a que el equipo tejano no pudo contar con los ocho jugadores obligatorios, Harden incluido, que exige el reglamento al estar la mayoría en cuarentena preventiva mientras se rastrean las pruebas positivas al coronavirus que se han dado dentro de la plantilla.
La decisión de la liga de multar a Harden llegó después que revisara un vídeo que fue subido a las redes sociales y en el que se ve a la estrella de los Rockets socializando sin máscara en un club a principios de esta semana.
Harden dio negativo por COVID-19 el lunes, martes y miércoles, pero de cualquier manera tuvo que quedar apartado como establecen los nuevos protocolos.
El vídeo de Harden de fiesta sin mascarilla, que fue publicado por Black Sports Online y ha estado circulando en las redes sociales, es supuestamente de la fiesta de Navidad de un club de Houston celebrada esta semana.
Los protocolos Covid-19 de la NBA prohíben a los jugadores ir a bares, salones o clubes y participar en reuniones sociales de más de 15 personas.
La liga dijo que Harden violó esas reglas cuando asistió a una «fiesta privada bajo techo», el lunes de esta semana.
Harden le dijo a los investigadores de la NBA que creía que cumplía con los protocolos de salud y seguridad que hay establecidos por la liga.
Siempre según la versión de Harden, accedió al recinto por una entrada separada y se sentó en un área retirada del lugar con su equipo de seguridad y llevaba una mascarilla.
Harden emitió un comunicado en Instagram el miércoles diciendo «todos los días es algo diferente» y que el evento no fue en un club de «striptease» y sí por una buena causa.
EFE