Un juez rechazó un intento republicano para anular la victoria del presidente electo demócrata Joe Biden porque, afirmó, la parte inconforme fue incapaz de mostrar el fraude cuando impugnó los resultados electorales de la zona metropolitana de Phoenix y señaló que la evidencia presentada en el juicio no revertirá la derrota del mandatario Donald Trump en el estado.
El juez Randall Warner desechó el viernes la impugnación presentada por la presidenta del Partido Republicano en Arizona, Kelli Ward, de que hubo una duplicación de las papeletas en la zona metropolitana de Phoenix porque las boletas iniciales de los electores fueron dañadas o no pudieron incluirse en los tabuladores.
Observadores de los comicios cuyo testimonio fue solicitado por Ward dijeron haber advertido problemas en el procesamiento de las boletas duplicadas, pero el juez escribió que esa situación fue señalada a los trabajadores electorales, que corrigieron los errores.
Warner escribió que “no hay pruebas de que las imprecisiones fueron intencionales o parte de un plan fraudulento. Fueron errores. Y dado el reducido número de papeletas duplicadas y la baja tasa de error, la prueba no muestra se haya incidido en el resultado”.
Jack Wilenchik, abogado de Ward, afirmó que la titular del Partido Republicano en el estado apelará la decisión ante la Corte Suprema de Arizona. “Tenemos un asunto importante que litigar aquí”, afirmó Wilenchik.
Ward afirma en su demanda que algunos suburbios de la periferia suroriental del condado Maricopa tuvieron un número inusualmente alto de papeletas duplicadas y que los resultados de los comicios en esa zona fueron “bastante incompatibles” con el padrón electoral y la tendencia histórica de la votación. En la demanda también se afirma que el software utilizado para procesar esas boletas las “prellenaba” más frecuentemente con el nombre de Biden en comparación con las concedidas al presidente Donald Trump.
Los abogados que defienden a funcionarios electorales en la demanda señalaron que sería una acción extraordinaria que una corte revierta el resultado de una elección en la que participaron más de tres millones de votantes en Arizona.
En una muestra que ordenó una corte de 1.626 papeletas duplicadas, Trump perdió siete votos debido a errores en el procesamiento de las boletas en el condado Maricopa. Un funcionario electoral había testificado que Trump podría haber perdido 103 votos si la tasa de error se extrapolaba entre todas las 27.800 papeletas duplicadas en el condado. Biden ganó Arizona por más de 10.000 votos.
Warner también desechó las acusaciones de Ward de que a los observadores electorales republicanos no se les otorgó el acceso debido a la verificación de las firmas de las papeletas enviadas por correo y de las papeletas duplicadas, y señaló que esas inconformidades debieron ser presentadas antes.
AFP