Avión del departamento de Justicia de EEUU que llegó a Cabo Verde volvió a despegar con dirección noreste

Un avión del Departamento de Justicia de Estados Unidos aterrizó este martes pasado el mediodía en la isla de Cabo Verde, donde se encuentra detenido Alex Saab, el empresario colombiano acusado de ser el testaferro del dictador venezolano Nicolás Maduro, y volvió a despegar por la tarde en dirección noroeste. El fugaz viaje tuvo lugar poco después de que la justicia del país africano accediera a extraditar al hombre vinculado al chavismo.

Así lo informó primeramente en su cuenta de Twitter el periodista Federico Black, quien detalló que el avión Gulfstream G550 -matrícula N708JH- arribó al aeropuerto internacional Amilcar Cabral de la isla de Sal a la 1.25, hora de Venezuela. El sitio de monitoreo aéreo FlightRadar24 también confirmó la llegada de la aeronave al país africano a las 16:25 (hora local), proveniente de del aeropuerto de Manassas, en el estado en Virginia en Estados Unidos.

Esta misma fuente señala que el Gulfstream G550 volvió a despegar a las 18:12 (hora local) desde el aeropuerto Amilcar Cabral, en Cabo Verde, aparentemente en dirección a Estados Unidos, aunque la aeronave en vuelo no estaba reportando su destino final. No hay información al momento sobre si Saab estaría volando en su interior.

Esa nave ya había estado en Cabo Verde el pasado 1 de noviembre. Su llegada en ese entonces había encendido las alarmas de una posible extradición de Saab a Estados Unidos. Sin embargo, el avión permaneció sólo unas horas, de acuerdo a lo consigndo por el portal Primer Informe.

La llegada este martes del avión del Departamento de Justicia a la isla africana se produce apenas unas horas después de que el Tribunal de Apelación caboverdiano de Barlavento decidió el lunes dar luz verde a la extradición a Estados Unidos del empresario colombiano.

“Una vez verificados (que se cumplen) los requisitos legales, los jueces de esta Corte acuerdan ordenar la extradición de Alex Saab Naim Moran a Estados Unidos, a fin de ser juzgado allí por ocho delitos”, anunció el Tribunal a última hora de la noche del lunes.

En agosto pasado, un tribunal de Barlovento había dado luz verde a la extradición de Saab. Sus abogados apelaron entonces la decisión.

El régimen de Maduro, que considera su detención “arbitraria”, pidió en septiembre una “medida humanitaria” para el empresario de 49 años, alegando que había sufrido “maltrato” y “torturas”.

Un tribunal regional ordenó detener la extradición, pero el proceso sigue su curso.

En un comunicado, la defensa de Saab aseguró que la decisión de este lunes supone “un desafío directo” a la orden del tribunal Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao) del pasado 2 de diciembre.

El Tribunal de Justicia de la Cedeao ordenó ese día a Cabo Verde poner bajo arresto domiciliario a Saab.

Una fuente del equipo de defensa de Saab informó entonces a la agencia EFE que el Tribunal, con sede en Abuya y del que es miembro Cabo Verde, falló a favor de que se termine con el actual régimen de encarcelamiento del empresario colombiano.

Saab fue detenido el pasado 12 de junio, cuando el avión en el que viajaba hizo escala para repostar en el Aeropuerto Internacional Amilcar Cabral de la isla caboverdiana de Sal, tras una petición de Estados Unidos cursada a través de Interpol por supuesto blanqueo de dinero.

El colombiano, que cumplió 49 años el pasado 21 de diciembre, mantuvo siempre bajo perfil hasta que apareció en la prensa, cuando la ex fiscal venezolana Luisa Ortega lo acusó, en 2017, de ser uno de los testaferros de Maduro.

El empresario, nacido en Barranquilla y de origen libanés, está relacionado con varias empresas, entre ellas Group Grand Limited (GGL), acusada de suministrar con sobrecostes alimentos para un programa de ayudas alimenticias del régimen de Maduro, conocido como CLAP.

Un funcionario del Gobierno estadounidense indicó en julio de 2019 que con los CLAP el empresario colombiano y tres hijastros de Maduro se lucraron, al parecer, con “cientos de millones de dólares”.

Estados Unidos también presentó cargos contra Saab y su mano derecha, Álvaro Enrique Pulido, a quienes acusa de blanquear hasta 350 millones de dólares supuestamente defraudados a través del sistema de control cambiario en Venezuela.

Washington, que encabeza la presión internacional contra Maduro, a quien tilda de “dictador”, ha impuesto sanciones contra quince empresas vinculadas a Saab, incluidas en una lista negra estadounidense como “beneficiarias”.

Si son hallados culpables, enfrentan hasta 20 años de prisión.

Infobae