La noche de este viernes se registró un masivo cacerolazo en las principales ciudades de Brasil en rechazo a la crisis sanitaria en Manaos porque no hay oxígeno para pacientes y el sistema de atención hospitalaria está al borde del colapso.
«En Manaos no hay oxígeno para pacientes y el sistema de atención hospitalaria está al borde del colapso», reseñó CN5.
Telam reportó que Bolsonaro sufrió «el peor cacerolazo en sus dos años y 15 días de gestión en todas las capitales del país, e incluso en barrios donde en 2018 había sido el amplio vencedor, en el marco de la crítica a su manejo de la pandemia, la incertidumbre frente a la vacunación y la falta de oxígeno en hospitales en Manaos, Amazonas».
Destacan que gritos de «fuera Bolsonaro y «genocida» se escucharon en barrios populares y ricos de San Pablo y Rio de Janeiro.
Uno de los convocantes al cacerolazo es el empresario y conductor televisivo ultraliberal Luciano Huck, considerado un precandidato presidencial por el partido Demócratas para 2022, quien en en segundo turno de 2018 llamó a votar a Bolsonaro contra Fernando Haddad, del izquierdista Partido de los Trabajadores.
Hasta este viernes, Brasil registró más de 8 millones 32 mil casos de covid-19 y más de 207 mil muertos por el letal virus.
Noticiero Digital