La dirigencia estudiantil de la Universidad de Los Andes (ULA), expresó su preocupación sobre la paralización de las actividades en esa casa de estudio. La presidenta de la Federación de Centros Universitarios (FCU), Ornella Gómez, instó a las autoridades universitarias a restablecer de modo presencial los consejos universitarios y a los representantes del gobierno nacional a resolver la crisis presupuestaria de la institución.
En el marco del programa de radio “Entre Razones” por Ciudad 99.3 FM, Gómez también dijo que se están discutiendo alternativas para reactivar las clases. “Hay problemas con el pago de las becas estudiantiles, con el sueldo de los profesores y la paralización de muchas actividades, los afectados son los estudiantes que ahora llevamos más de 200 días sin poder seguir estudiando”.
Exigen soluciones
La crisis que agobia al sector universitario es de diversas aristas, según Gómez el estudiantado ha visto como se ha perdido el servicio de comedor, de transporte y ahora sufren los efectos de la falta de profesores, “se está discutiendo que hacer, porque hay que encontrar alternativas o soluciones, las respuestas no se van a conseguir en consejos universitarios virtuales, los estudiantes han tenido que abordar muchos problemas, incluso el de la vigilancia para evitar invasiones y ataques contra las instalaciones”.
Los profesores han visto sus salarios hundirse. Las autoridades universitarias manifiestan que el presupuesto que reciben es sumamente bajo a lo que corresponde y se devalúa en el tiempo por la hiperinflación. Gómez dijo que a muchos estudiantes les ha tocado comprar desde ya hace varios años, hasta resmas de papel y “tóner” para poder recibir constancias y demás solicitudes impresas.
Ornella Gómez describe el caos
Entre las discusiones que se están llevando a cabo, hay propuestas de que los estudiantes paguen a los profesores, quienes ganan salarios de unos tres dólares al mes. Sin embargo, no todos están en capacidad de hacerlo. Gómez también manifestó que ha habido abusos en algunos trámites para los graduandos, como el pago por pergaminos para títulos y cobros de hasta 25 dólares a 75 estudiantes para trasladar los documentos desde Táchira a Mérida.
“Tuvieron que pagar por unas planillas que no pueden tener errores o tachaduras y que se debe comprar otra vez si el que la llena la daña, sea el solicitante o la secretaria que recibe en taquilla el requisito”, explicó.
Los estudiantes merideños y foráneos que estudian en esta universidad, no solamente padecen la crisis de los servicios que anteriormente brindaba la institución. También sufren los embates de la escasez de gasolina y transporte público, los altos precios de pasajes y la falta de dinero efectivo, los racionamientos de energía eléctrica, la crisis sanitaria y la pobreza.
La FCU pide auxilio a las comunidades
Ornella Gómez hizo un llamado a la sociedad en general, ya que las universidades venezolanas están prácticamente en vías de desaparición, “este problema no solamente afecta a los estudiantes, también al resto de los venezolanos, porque por la paralización que existe pronto se dejaría de producir profesionales, como en el caso de la salud en que pronto se podría dejar de graduar médicos”, señaló.
En ese sentido informó que la FCU bajo su dirección, estará llevando jornadas junto con comunidades, para sensibilizar a la población y que se sumen a rescatar la ULA. Se quiere evitar el desmantelamiento que comenzó a sufrir con robos y saqueos de sus instalaciones. Se trata de una situación que está ocurriendo con el resto de las instituciones universitarias.
La crisis en esta universidad no solamente golpea a la región, a toda la actividad económica a través de los servicios de educación, sino también a estudiantes de otras regiones del país. Las dificultades para los habitantes de Mérida, para estudiar en la ULA, son ya muy grandes, para los foráneos se multiplican.
Operativos de limpieza
Por su parte, Christian Rodríguez, secretario general de la FCU, compartió con Gómez en “Entre Razones”, expuso que han tenido que adaptarse a esta nueva situación. Explicó que la paralización de la ULA, obedece a la crisis económica que padece y que se debe buscar la forma de que esta institución se sostenga con recursos e ingresos propios. También dijo que a la problemática se ha sumado la crisis sanitaria del Covid-19, lo que detuvo la realización de reuniones del Consejo Universitario de manera presencial.
“Hemos hecho labores de limpieza y recuperación de espacios, desmalezamiento y reacondicionamiento, para evitar que la ULA se pierda, hemos recibido apoyo de la alcaldía y la gobernación con maquinaria y equipos para limpiar, también junto unos decanos, cuidamos terrenos que se han querido invadir”, concluyó Rodríguez.
Nota de Prensa