El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, señaló este viernes en una entrevista que entre Rusia y la Unión Europea actualmente no existen ni «unos contactos esporádicos».
«No ha quedado nada, ni siquiera unos contactos esporádicos sobre asuntos internacionales», dijo el jefe de la diplomacia rusa al canal RBC TV.
Así, en las conversaciones relacionadas con el problema nuclear iraní, Rusia y la UE participan en las labores de un grupo conjunto y lo mismo ocurre en las conversaciones sobre Oriente Próximo, donde hay un «cuarteto» de mediadores formado Rusia, EEUU, la UE y la ONU, precisó Lavrov.
«Es decir, no se trata de (nuestra) relación con la UE, sino de una cooperación internacional», apuntó.
La semana pasada, Lavrov aludió a una posible ruptura de las relaciones con la Unión Europea en caso de nuevas sanciones, después de que el alto representante para Política Exterior de la UE, Josep Borrell, asegurara que Rusia «se está desconectando progresivamente de Europa».
A la vez, este lunes el diplomático ruso explicó que la ruptura entre Rusia y los Veintisiete comenzó ya en 2014 por Ucrania, al tiempo que recordó que «no hay que confundir la UE con Europa».
Borrell, que se convirtió el pasado 5 de febrero en el primer jefe de la diplomacia comunitaria en visitar Rusia desde 2017, admitió que la reunión con Lavrov había sido tensa, especialmente cuando pidió la liberación del líder opositor, Alexéi Navalni, condenado a una pena de cárcel.
A su vuelta a Bruselas, el diplomático español no descartó la adopción de una nueva partida de sanciones contra Moscú, algo que ya han pedido varios miembros de la Unión.
El Kremlin expresó esta semana su confianza en que la UE tenga la voluntad política para continuar el diálogo con Rusia y que esto prevalezca sobre la amenaza de una nueva espiral de sanciones.
EFE