Luego de que las autoridades congoleñas acusaran a los rebeldes de las Fuerzas Democráticas de Liberación de Ruanda (FDLR) de la muerte del embajador italiano Luca Attanasio, los rebeldes hutus ruandeses se defendieron, acusando a los ejércitos congoleño y ruandés de ser responsables del ataque que le costó la vida al diplomático.
«El convoy del embajador fue atacado en una zona denominada de las ‘tres antenas’ cerca de Goma, en la frontera con Ruanda, no lejos de una posición de las FARDC (Fuerzas Armadas de la RDC) y militares ruandeses de las Fuerzas de Defensa ruandesa», afirma el comunicado de las FDLR. Y agrega, «la responsabilidad de este vil asesinato debe buscarse en las filas de esos dos ejércitos y de sus patrocinadores que acordaron una alianza contra natura para perpetuar el saqueo del este de RDC».
Los rebeldes hutus ruandeses «exigen a las autoridades congoleñas y la MONUSCO (la misión de la ONU en RDC) esclarecer las responsabilidades de este vil asesinato en lugar de recurrir a acusaciones precipitadas», dicen.
En el ataque también resultaron muertos el guardaespalda italiano Vittorio Lacovacci y el chofer congoleño del Programa Mundial de Alimentos (PMA) Mustapha Milambo, en un ataque calificado de «terrorista» por el presidente de RDC Félix Tshisekedi.
DW