Hace tres semanas, Gerard Piqué y Antoine Griezmann discutieron acaloradamente durante un encuentro que el Barcelona perdió por goleada ante el París Saint-Germain en la Liga de Campeones, con lo que se había acentuado la crisis del conjunto español.
El miércoles, ambos jugadores festejaron juntos, después de que Griezmann asistió a Piqué para que anotara un tanto en los descuentos.
Barcelona liberó parte de la presión que lo ha asfixiado en fechas recientes, al borrar una desventaja, obligar a la prórroga y vencer 3-0 al Sevilla el miércoles, para avanzar a la final de la Copa del Rey por novena ocasión en 11 temporadas.
“El equipo lo merece, por su trabajo, por su honradez, porque hemos mejorado muchas cosas sin balón, somos un equipo más agresivo, siempre hemos creado ocasiones”, resaltó el entrenador Ronald Koeman. “El equipo ha mejorado mucho, por eso estoy orgulloso. Es un resultado importante para el club y para mí también”.
La escuadra catalana remontó el revés de 2-0 sufrido en la ida. Logró igualar el marcador global en el cuarto minuto de descuento, cuando Piqué anotó mediante un cabezazo.
“Piqué ha demostrado ser uno de los líderes del equipo”, dijo Koeman. “Ha defendido muy bien, ha aguantado y ha marcado el 2-0 en un momento importante”.
Martin Braithwaite, quien ingresó a los 89 minutos, marcó al comienzo del alargue para que el Barça sellara el pasaje con angustia.
El arquero Marc-André ter Stegen mantuvo con vida al Barcelona a los 73 minutos, al atajar un penal ejecutado por el argentino Lucas Ocampos, que amenazaba con sepultar definitivamente cualquier esperanza de los dirigidos por Koeman.
“Ha sido un momento decisivo. Si ellos empatan, marcar tres goles en el tiempo que faltaba era muy complicado”, reconoció el estratega holandés. “Sabemos que Marc sabe parar penaltis”.
Sevilla terminó el encuentro con dos hombres menos, tras la expulsión del brasileño Fernando Reges en los últimos instantes del tiempo regular y de Luuk de Jong, a los 103 minutos.
Ousmane Dembélé abrió el marcador en los albores del encuentro por el Barça, que busca conquistar la copa por 31ra ocasión, un récord.
La victoria con suspenso llega dos días después de que la policía arrestó al expresidente del club Josep María Bartomeu, como parte de una pesquisa sobre presuntas irregularidades durante su gestión.
Dentro de cuatro días, el club elegirá a un nuevo presidente, quien tendrá la misión de resolver una de las peores crisis en la historia de la entidad azulgrana.
Sevilla buscaba volver a una final de la Copa del Rey que no disputa desde 2018, cuando cayó ante el propio Barcelona. Cinco veces monarca del certamen, el conjunto hispalense sucumbió ante el conjunto barcelonista en la final de 2016.
La final de la presente edición se realizará el 17 de abril en el estadio La Cartuja en Sevilla.
Este jueves, Levante recibe al Athletic de Bilbao en la otra semifinal. El marcador se encuentra igualado 1-1 tras la ida.
AP