Escrita en el siglo ilustrado y de la razón, el siglo XVIII, la novela Los Viajes de Gulliver, es invariablemente considerada un libro infantil, casi un cuento reducido al primero de sus episodios, La instancia de Gulliver en el país de Liliput. Sin embargo, no fue esta la intención de su autor, Jonathan Swift, que, por medio de la alegoría, pretendía criticar algunas de las costumbres sociales de su propia época, especialmente del mundo político, científico y social.
Los viajes de Gulliver es realmente una obra que narra los diversos viajes de su protagonista por diversas naciones fantásticas, bajo las cuales subyace una crítica a la sociedad inglesa de la época. Así, la instancia de Gulliver en Lilliput, el país en donde el protagonista es un gigante, y episodio más conocido de la historia, es sólo uno de los capítulos. Gulliver pasará consecutivamente por Brobdingnag, donde los gigantes son los pobladores y Gulliver el enano; Laputa, sociedad dedicada al arte sin aplicación práctica; Glubbdubbdrib, donde logra conocer a los espectros de personajes de la historia anterior; Srtuldbrues, patria de la vida eterna pero sin juventud; Japón, lugar con aspectos realistas especialmente crítico en la cuestión religiosa; o Houihnhnms, episodio tristemente olvidado, donde los caballos son la raza dominante y los humanos son salvajes conocidos como “Yahoos”. El regreso de Gulliver será duro porque todo lo visto en sus viajes tiene su reflejo en la sociedad inglesa llena de defectos.
Esta fantasía como crítica social la escribió Jonathan Swift en el año 1726. La literatura anoto cientos de prejuicios resaltar sobre esta obra. “La ambición suele llevar a las personas a ejecutar los menesteres más viles. Por eso, para trepar se adopta la misma postura que para arrastrase”.
Quisimos añadir algunos comentarios del autor, recogidos en la nota literaria que sobre la obra aparece en el libro La Cultura de la editorial Biblok. Swift afirma que “Un hombre nunca debe avergonzarse por reconocer que se equivocó. Es tanto como decir que hoy es más sabio de lo que fue ayer”. “Swift, en la novela, se plantea en muchas ocasiones cual es la situación del hombre en la sociedad, si es corrupto por naturaleza o si puede aprender a mejorar”.
Desde luego nos llama la atención la travesura provocada por la crítica social de Swift y la dureza en los performances anotados dentro y fuera de la novela y sus cuadros colaterales, tanto como los comentarios logrados por su obra que movieron a los entendidos de la época, y las posteriores a la publicación. Estas inquietudes movieron nuestra voluntad en lo que pudimos entender y, sin pretensiones literarias, hemos querido repetir y publicar, en nuestra modesta columna, algunos comentarios de la literatura mundial sobre esta gran obra.
Con el ridículo al que Swift quiso someter la sociedad de la que formaba parte, el autor logra, por extensión, ridiculizar cualquier nación que conforme la sociedad mundial actual. He allí la singularidad de su vigencia.
Luis Acosta