La reingeniería de una nueva identidad nacional
En Venezuela en el campo político, el gobierno y determinados personajes comenzaron a producir con el desestimulo a la educación, la mediocridad sumada a migraciones extranjeras, ejecutadas sin control alguno, como mecanismo para afectar nuestra cultura como costumbres, para alcanzar con ello, poder manipular a las masas, para pretender perpetuarse en el poder. Para su beneficio y enriquecimiento personal.
Se ha procedido, a efectuar y permitir, migraciones sin ningún tipo de control, para acelerar, esta pérdida de identidad, con un proceso de transculturación en la pérdida de identidad en los venezolanos, de manera forzosa, rodeandonos de seres cuyos códigos de conducta social son muy diferentes y, en ocasiones, hasta ofensivos, respecto de los propios.
Porque las raíces, la lengua y las normas sociales son tres de los componentes más importantes para la definición del ser humano. Donde el venezolano, se ve obligado a encontrar nuevas maneras de describirse así mismo, nuevas maneras de ser.
Nos encontramos, ante la reingeniería de una nueva identidad nacional, con efectos negativos al Continente Americano. Para que la sociedad asuma un comportamiento egoísta y con ello, generar confusión mental, basada en elementos externos, fomentando la ambición, codicia, envidia, pasión por el dinero y auspiciar la mendicidad.
Establecen una base, sobre la que se sustenta la pérdida de valores, parte de la ignorancia, la base para justificar cualquier acción por destructiva que sea, hacia nuestros congéneres, la violencia en cualquiera de sus grados para conseguir el fin.
Destruyen la educación, al decodificarla de sus objetivos primarios, que como efecto inmediato produce la pérdida de valores. Según Aristóteles «la educación y los hábitos hacen al hombre bueno«. Sólo a través de la experiencia y el sufrimiento podemos llegar al conocimiento y alcanzar el entendimiento. La empatía, el estudio, el aprendizaje dirigido con amor y claridad, forman el correcto pensamiento, la acción justa, la coherencia entre la palabra y la acción, son elementos necesarios para salir del error y la ignorancia.
Johnny Ramón Galué Martínez
@COOTUR