El presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, derogó este viernes su polémico decreto ejecutivo 1313, que reformaba el reglamento para la concesión de indultos a personas privadas de la libertad y abría esa posibilidad a todo tipo de personas con crímenes mayores.
«Para evitar tergiversaciones y malos entendidos, en torno a los parámetros sobre los indultos, el presidente Moreno ha dispuesto derogar el Decreto Ejecutivo 1313, con fecha 10 de mayo del 2021», precisó la Secretaría de Comunicación en sus redes sociales.
En dicho artículo se establece que el indulto es una facultad discrecional del presidente, con la cual puede otorgar la conmutación, perdón o rebaja de cumplimiento de pena, a privados de libertad con sentencia condenatoria ejecutoriada y que mantengan una buena conducta después del delito.
Sin embargo, el indulto no puede ser aplicado en casos de delitos de la administración pública como peculado o cohecho.
La reforma del 10 de mayo generó una gran polémica porque abría el indulto a todo tipo de casos impensables, al proponer la inclusión de las enfermedades crónicas como argumento para su solicitud.
Con dicha reforma, aquellas personas que tuvieran afecciones de larga duración y de progresión lenta, podían solicitar el indulto presidencial, independientemente de su crimen, denunciaron medios locales.
La inclusión de la palabra «crónica» en uno de los artículos de una ley de 2015 abría la posibilidad del indulto, por ejemplo, a privados de libertad por delitos de genocidio, tortura, desaparición forzada de personas, secuestro y homicidios por razones políticas o de conciencia, en caso de poseer una enfermedad catastrófica o terminal, lo cual generó disconformidad en muchos sectores.
Moreno, que abandonará la Presidencia el 24 de mayo, emitió así un nuevo decreto, el 1341, para derogar los cambios aplicados hace unos días.
EFE