El escritor y columnista Rafael Rattia fue imputado por Instigación al odio
Instigación al odio. Ese fue el delito por el cual fue imputado el escritor y columnista de El Nacional, Rafael Rattia, residenciado en Maturín, capital del estado Monagas. La audiencia de presentación fue realizada la tarde de este sábado, 5 de junio, en el palacio de justicia monaguense.
El coordinador del capítulo Monagas del Foro Penal, José Armando Sosa, informó a El Pitazo este 6 de junio que Rattia fue imputado por la Fiscalía 90 Nacional y que la audiencia fue realizada por el Tribunal 4 Penal.
La audiencia se celebró luego de que Rattia permaneció detenido durante dos días en la sede de la Dirección de Investigación Penal de la Policía del estado Monagas, ubicada en el sector Juanico. Este fue el mismo organismo que practicó su detención el jueves 3 de junio en La Floresta, donde está situada la residencia del columnista.
Un día después de su aprehensión, la diputada de la Asamblea Nacional del 2015, María Gabriela Hernández, indicó a los medios de comunicación que su arresto estaría vinculado a un artículo de opinión escrito por Rattia y en el que supuestamente se hacen descalificaciones en contra del fallecido ministro de Educación, Aristóbulo Istúriz.
Previo a la detención, la comisión policial ejecutó un allanamiento en la residencia del escritor en la que se llevaron una laptop, dos teléfonos celulares, uno de él y el otro de su esposa; una caja de libros y un equipo para descargar libros digitales.
Rattia es el tercer escritor detenido este 2021 en el oriente venezolano tras publicar artículos en los que supuestamente se descalifican a figuras del gobierno de Nicolás Maduro. En marzo, Juan Manuel Muñoz y Milagros Mata Gil fueron arrestados en El Tigre, estado Anzoátegui, por un artículo de opinión que rodó en redes sociales y en el que se hacía alusión a la celebración de una fiesta en la que presuntamente participó un funcionario oficialista.
Rafael Rattia es licenciado en Historia y oriundo del estado Delta Amacuro. Vive en Maturín desde el año 2000. Es un hombre de 60 años de edad que necesita reposo tras ser operado de un ojo. Es hipertenso y sobreviviente de un cáncer en el rostro.
El Pitazo