Más de 2 millones de personas se presentaron para un estudio a largo plazo, que tiene como objetivo examinar el efecto de la renta básica incondicional en Alemania, y solo 122 de ellas fueron elegidas para la investigación. Se trata de personas de entre 21 y 40 años que viven solas y normalmente disponen de entre 1.200 y 2.600 euros netos al mes, reza la página web del proyecto ‘Mein Grundeinkommen’ (‘Mi renta básica’).
A partir de este 1 de junio, los ‘afortunados’ van a recibir 1.200 euros mensuales (unos 1.460 dólares) a lo largo de los próximos tres años, y, a cambio, solo deben llenar un cuestionario cada 6 meses. Este dinero, que proviene de alrededor de 150.000 donantes privados, se sumará a los ingresos normales de los beneficiarios y no hay ningún tipo de restricciones de cómo usarlo: lo pueden gastar, invertir o ahorrar.
Además, en el estudio participan otras 1.380 personas que forman parte de un grupo de comparación: no reciben un ingreso básico, pero completan los cuestionarios. Solo la comparación entre quienes tienen el ingreso básico y quienes no permitirá hacer declaraciones sobre los efectos de la medida, según los creadores del experimento.
Es la primera vez que se realiza un proyecto de investigación de este tipo en Alemania. Con este experimento los investigadores quieren averiguar cómo se comportarán las personas cuando reciban una supuesta renta básica incondicional que las libera de todas las preocupaciones materiales a un nivel modesto: ¿les da pereza o las estimula?
La profesora de psicología Susann Fiedler, que presta apoyo científico al estudio, cree que lo más probable es que ocurra esto último, informa Die Tageszeitung.
Por su parte, Jürgen Schupp, sociólogo del Instituto Alemán de Investigación Económica, señaló que también les interesa descubrir «cómo la clase media se enfrentaría a una renta básica». «Nuestro experimento es oportuno porque la crisis del coronavirus también ha puesto de manifiesto los puntos débiles del actual sistema de seguridad social», agregó.
RT