Migrante venezolano de 23 años lleva 22 días desaparecido en el mar de Perú
22 días se cumplieron este jueves, 3 de junio, desde que se supo que Jimmy Daniel Montilla Carrillo, un migrante venezolano de 23 años, cayó al mar frente a las costas de la caleta de Morro Sama, en el departamento de Tacna, al sur de Perú, cuando realizaba faenas de pesca en una embarcación privada.
Hasta la fecha, familiares y amigos del joven, oriundo de la población de Chabasquen, capital del municipio Unda del estado Portuguesa, afirman que las autoridades del país Inca no han hecho lo suficiente para localizarlo. Piden a los paisanos venezolanos a que apoyen la solicitud de no cesar la búsqueda.
Montilla Carrillo fue reportado como desaparecido el pasado 12 de mayo. En un comunicado emitido el día del siniestro, la capitanía de puerto informó que “el tripulante de nacionalidad venezolana, conocido como Jimmy, cayó al mar cuando realizaban faenas de pesca en las coordenadas geográficas latitud 18 01 00 sur, longitud 070 58 00 oeste con una distancia aproximada de 5 millas de costa de la caleta de Morro Sama”, en el departamento de Tacna, al sur del Perú.
Las autoridades peruanas exhortaron a las embarcaciones que estuvieran cerca de la zona a colaborar con las labores de búsqueda del joven desaparecido, pero más de 20 días después los allegados del joven siguen sin saber nada de él o de su cuerpo y tampoco las circunstancias en que el trabajador venezolano cayó al mar.
“Jimmy es el mayor de 2 hermanos. Aquí era estudiante y deportista. Practicaba el fútbol. Se fue a Perú hace tres años por la pésima situación que vivimos aquí en Venezuela. Su mamá está desesperada y mantiene la fe de que su hijo esté con vida, pero han pasado tantos días y aún está desaparecido”, contó Andrade.
El ciudadano precisó que la familia del joven tuvo conocimiento de lo sucedido porque sus amigos en Perú contactaron a la novia de Montilla Carrillo, también migrante en Panamá, para informarle.
“El caso es muy extraño porque es casi imposible que alguien se caiga de una embarcación por accidente y no sea visto ni rescatado. Por eso presumimos que lo lanzaron intencionalmente. Mucha gente dice que en esa zona, los dueños de las embarcaciones siempre acostumbran a hacer ofrenda al mar, para que el año posterior les sea más próspero. Puede ser un mito, pero la desaparición de Jimmy debe ser investigada, pero las autoridades no se interesan a averiguar al respecto”, expresó Andrade.