Senado de Chile aprobó el matrimonio igualitario
Chile está a un paso de convertirse en el octavo país de América Latina que permite el matrimonio igualitario. El Senado aprobó este miércoles 21 de julio un proyecto de ley que permite que personas del mismo género se casen y puedan adoptar hijos con una amplia mayoría.
La legislación llevaba cuatro años debatiéndose en el Legislativo, hasta que el presidente Sebastián Piñera le dio «carácter de urgencia» y le mostró su apoyo, en contra de algunos de sus aliados políticos conservadores. Tras la luz verde del Senado, el proyecto de ley pasará a votarse en la Cámara de Diputados, el último paso antes de su aprobación definitiva.
«Estamos lo más cerca que hemos estado en la historia de Chile de la igualdad familiar para las parejas del mismo sexo. Hoy celebramos un paso más hacia una victoria rotunda para toda la sociedad», celebró la directora ejecutiva de la Fundación Iguales, Isabel Amor.
El movimiento Movilh auguró que «se acerca el fin de la discriminación a las parejas del mismo sexo y a las familias homoparentales» con un «mejor camino para las nuevas generaciones».
Desde 2015, las parejas del mismo género podían unirse bajo la figura del «Acuerdo de Unión Civil». Muchos de los senadores que se oponían al matrimonio igualitario lo hacían bajo el argumento de que ya estaba reconocido en ese tipo de vínculo legal.
Sin embargo, la unión civil no reconocía derechos de filiación, es decir, de poder adoptar conjuntamente o de reconocer los hijos de uno de los integrantes de la pareja como hijos de las dos personas. Es por eso que la ley de matrimonio igualitario se convirtió en una de las principales luchas de los colectivos LGBTI+ en Chile.
El Senado votó por separado la aprobación del matrimonio, con 28 votos a favor y 14 en contra, y la aprobación de los derechos filiativos, con 29 votos a favor y 14 en contra.
Además, la iniciativa legislativa también propone un lenguaje más incluyente, como cambiar el concepto de madre o padre por el de progenitores, y deshace una causal de divorcio considerada homófoba, que es la homosexualidad como motivo de divorcio culposo.
Piñera aprobó la iniciativa al término de su mandato
El apoyo de Piñera a la ley, explícito en su último discurso de rendición de cuentas el pasado 1 de junio, fue motivo de sorpresa en Chile. Para empezar, significó dar la espalda a algunos de los partidos que forman parte de la coalición de Gobierno, como el partido ultraconservador Unión Demócrata Independiente (UDI).
Una de sus senadoras, Luz Ebensperger, defendió en el Senado que «no es discriminación cuando se busca igualar situaciones que no son iguales», en referencia al matrimonio entre una pareja heterosexual u homosexual.
Además, Piñera había rechazado darle carácter de urgencia a la ley en 2019.
El 65% de los chilenos están a favor del matrimonio igualitario, según los últimos datos de un sondeo realizado por Ipsos. Eso convierte a Chile en el segundo país de América Latina con más apoyo a este tipo de unión, solo por detrás de Argentina.
France24 con EFE y medios locales