Ashraf Ghani permaneció en Afganistán apenas unas horas el domingo, antes de huir del país junto a su familia tras la toma de Kabul por parte de las milicias del grupo Talibán.
Ahora que ya se sabe de su paradero, el depuesto presidente afgano, que se fue del país sin haber hecho una renuncia pública a su cargo, defendió su rápida partida asegurando que lo hizo para evitar un “derramamiento de sangre” en la capital.
“Si me quedaba, hubiera sido testigo de un derramamiento de sangre en Kabul. Mi misión era que, por ansias de poder, Kabul no iba a convertirse en otro Yemen o Siria”, dijo Ghani desde Abu Dabi y a través de un video publicado en su cuenta de Facebook.
En su primera intervención pública tras huir de Afganistán, el exmandatario insistió en que su partida fue tan precipitada que no tuvo tiempo de llevar nada consigo, e incluso no pudo recuperar “documentos confidenciales” en su oficina, como afirmó. De esta manera, Ghani trató de negar las acusaciones que aseguran que huyó con baúles llenos de dinero.
“Que me llevé dinero, es algo que no tiene ningún tipo de fundamento, son mentiras, y se puede averiguar su falta de fundamento por los funcionarios de aduanas y otras autoridades”, señaló el expresidente afgano durante su declaración.
Desde el exilio, lamentó que las negociaciones entre su Gobierno y los talibanes, que comenzaron en septiembre del año pasado en Doha, Qatar, fueran un “fracaso” y no lograran cumplir con su objetivo.
Muertos y heridos en Jalalabad por haber colgado la bandera afgana
La bandera negra, roja y verde de Afganistán que ondeaba este miércoles en el centro de Jalalabad, en la provincia de Nangarhar, fue rápidamente retirada por los talibanes y remplazada por la bandera blanca con la inscripción de la declaración de fe islámica, que representa al Emirato Islámico, como se autodenomina el grupo insurgente.
El hecho tuvo lugar durante una manifestación a favor de la bandera nacional y en contra del nuevo régimen islámico que se instaura una vez más en el país.
La protesta fue un signo de provocación para los talibanes que no dudaron en abrir fuego contra los manifestantes, de los cuales al menos dos habrían muerto y varios más resultaron heridos, según le dijeron dos testigos a la agencia Reuters.
“Los manifestantes querían colgar la bandera nacional tricolor en vísperas del aniversario de la independencia de Afganistán del Imperio Británico”, dijo a la agencia de noticias EFE un ciudadano de Jalalabad, quien pidió el anonimato.
Cientos de personas también se reunieron por la misma causa en la provincia vecina de Kunar, fronteriza con Pakistán; en la ciudad de Asadabad, en la provincia de Kunar y en la provincia de Khost.
El país que no logró ser reconstruido en veinte años de guerra
Fueron dos décadas de presencia militar internacional en Afganistán. Ahora, la retirada casi en su totalidad de las tropas de Estados Unidos y la OTAN del país asiático aceleró la toma del control por parte de los talibanes.
Los esfuerzos por combatir al terrorismo internacional y tratar de formar a las fuerzas de seguridad afganas han dejado a la OTAN en un “serio dilema”, como aseguró Jens Stoltenberg, secretario general del organismo durante una rueda de prensa el martes.
Ante el fracaso de la Alianza al tratar de reconstruir Afganistán democráticamente, el político noruego anunció una reunión de emergencia. “He convocado una reunión virtual extraordinaria de los ministros de Exteriores de la OTAN este viernes 20 de agosto para continuar nuestra estrecha coordinación y abordar nuestro enfoque común sobre Afganistán”, indicó Stoltenberg en su cuenta de Twitter.
Por su parte, los ministros de Relaciones Exteriores de la Unión Europea (UE) aseguraron el martes, durante una reunión de emergencia, que solo cooperarán con los talibanes si respetan los derechos fundamentales, incluidos los de las mujeres y menores de edad, y evitan el uso del territorio afgano por terroristas.
El alto representante de la UE para la Política Exterior, Josep Borrell, reconoció que en Afganistán se ha logrado cumplir el objetivo de destruir a Al Qaeda, pero no el de construir un Estado moderno capaz de garantizar las libertades fundamentales y los derechos humanos.
El bloque anunció que tendrá otra reunión para hablar al respecto, sin confirmar por ahora la fecha del encuentro.
Los talibanes impiden la evacuación de muchos afganos, dice Estados Unidos
La rapidez con la que los talibanes volvieron a tomar el control en Afganistán ha provocado escenas caóticas en el aeropuerto de Kabul. Las pistas de los aviones se han visto llenas de diplomáticos, ciudadanos extranjeros y afganos que intentan huir del país.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y la vicepresidenta Kamala Harris hablaron este miércoles sobre formas de acelerar las evacuaciones de estadounidenses y refugiados de Afganistán con su equipo de seguridad nacional.
Pero, algunos funcionarios de la Casa Blanca han demostrado su preocupación sobre cuántos afganos en riesgo podrían ser evacuados.
El martes, las tropas estadounidenses que custodiaban la evacuación en el aeropuerto de Kabul dispararon algunos tiros al aire para controlar a las multitudes.
En declaraciones este miércoles ante la prensa, la subsecretaria de Estado de Estados Unidos, Wendy R. Sherman, informó que están trabajando de la mano de aliados para identificar población en riesgo en Afganistán para asistir a mujeres, menores de edad, defensores de derechos humanos y periodistas. “Los talibanes, contrario a sus declaraciones públicas y sus compromisos con el Gobierno, están bloqueando el deseo de muchos afganos de abandonar el país cuando están en el aeropuerto”, afirmó Sherman.
La subsecretaria de Estado dijo además que, en las últimas 24 horas, los vuelos militares estadounidenses habían evacuado a aproximadamente 2.000 personas.
El Pentágono tiene como objetivo evacuar hasta 22.000 solicitantes de Visa de Inmigrante Especial (SIV), sus familias y otras personas en riesgo.
France24 con Reuters, AP, EFE y medios locales