El día, finalmente llegó. Después de 19 largos meses de espera, el calor se volvió a sentir en los predios del Salón de la Fama en la población de Cooperstown.
Finalmente, cientos de aficionados del béisbol, en especial de los Yanquis de Nueva York, verían ser exaltado al Templo de los Inmortales a uno de los jugadores más incónicos de la franquicia y para el béisbol en general: Derek Jeter.
El jardín del Clark Sport Center, a unos kilómetros del sagrado templo peloteril fue el escenario donde Derek Jeter, Larry Walker, Ted Simmons y Marvin Miller fueron presentados como nuevos inmortales.
“Quiero que cada uno de los miembros que pertenecen a esta familia del Salón de la Fama se sienta orgulloso de mi. No por mis números, sino por cómo jugué este deporte. Como respeté a este deporte”, fueron algunas de las palabras del sempiterno ‘Capitán’ de los neoyorquinos.
La algarabía no era normal. Los fieles seguidores de los Bombarderos se apostaron para escuchar a quien fuera el líder de ese equipo que entre 1996 y 2014 (años de servicio de Jeter) ganaron cinco Series Mundiales.
Con la camisa de rayas y la insignia de los Yanquis en el pecho, que, incluso vestía el mismísimo Salón de la Fama, Reggie Jackson, le dieron la bienvenida al templo sagrado a Derek Jeter.
Para engalanar aún más la fiesta, Michael Jordan, legendario jugador y para muchos el rey del baloncesto en la NBA acompañó a su amigo al evento más importante de su carrera.
“Esto es un juego que requiere mucho sacrificio y no hay nadie por encima del juego”, así fueron las palabras con que terminó Jeter su discurso en el que agradeció a sus familiares y miembros importantes en su carrera.
Por último, Larry Walker, finalmente hizo su entrada al HOF tras 10 años de espera y tanto Simmons como Miller lo hicieron por el Comité de Veteranos.
A finales de noviembre próximo la Asociación de Cronistas de Beisbol de Estados Unidos enviará a sus afiliados el formulario con los nombres de los candidatos que son elegibles para 2022.
El dominicano David “Big Papi” Ortiz aparece por primera vez en las papeletas y con credenciales de favorito, entre otras cosas, por sus siete trofeos Bate de Plata como designado, sus 541 jonrones y el galardón de Jugador Más Valioso de la Serie Mundial de 2013. Ortiz jugó por 20 temporadas con Minnesota (1997-2002) y Boston (2003-16).
Otro que se estrena en el formulario es Alex Rodríguez, nacido en Miami, de raíces dominicanas, cuyas posibilidades de ser inmortalizado se ven afectadas por haberse visto vinculado al uso de sustancias ilegales para mejorar el rendimiento.
En 22 temporadas con Marineros (1994-2000), Rangers (2001-03) y Yanquis (2004-16), A-Rod fijó promedio vitalicio de .295 con 696 jonrones y remolcó 2 mil 86 carreras en 2 mil 784 juegos.
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