«Esito» Maduro. Por Eugenio Montoro
Pobrecito (esito) Maduro, las cosas le están saliendo mal y cada vez con más frecuencia. Esto alegra a sus detractores (quienes dicen que se lo merece) y crea una nerviosa alerta entre sus cercanos para poner pies en polvorosa en cuanto sea necesario. Estas líneas son un recuento de los males que se le juntaron a Maduro y las razones del porqué, hace rato, no duerme bien.
1-La fama de dictador. Crea fama y acuéstate a dormir dice el dicho y eso mismo le pasó al hombre. De tanto acusarlo de que no existía la separación de poderes, tal como en cualquier dictadura, todo el mundo lo supo. Era muy fácil contar los casos que el TSJ decidía a favor del régimen y cuantos a favor de la oposición. Siempre era igual, 3856 ganados por Maduro y ninguno por la oposición. También la Fiscalía hacía lo propio y acusaba a cualquiera que molestara más de la cuenta y sin mucho trámite iba preso. Centenares de personas debieron de huir de país por esta causa.
Por supuesto vale la pregunta de en qué perjudica a Maduro ser un dictador. Pues en el mundo moderno un dictador se convierte en una especie de zombi asqueroso al que todo el mundo le saca el cuerpo y para muestra un botón. Por estos días un artista mexicano le cantó en su cumpleaños y eso le hizo que le rescindieran varios contratos como repudio a su actuación.
2- Las sanciones. Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea, entre otros, han venido poniendo trabas al régimen venezolano en asuntos comerciales y acusando directamente a decenas de personas asociados a Maduro. Hasta los gringos, al mejor estilo del lejano oeste, pusieron carteles en los árboles ofreciendo dinero por la captura de varios de los principales personeros del régimen incluyendo al mismo Maduro por un monto de 15 millones de dólares. Dicen que esto molestó mucho a Diosdado pues por él solo ofrecen 10 millones como si él fuese menos maluco que el otro, cosa que no es verdad.
Las sanciones generan un enredo comercial intenso que presiona al régimen en casi todos los sentidos. Así será de gordo el problema, que el punto más importante de las negociaciones en México es precisamente el retiro de las sanciones.
3- Los cantantes. Así han venido a llamar a Alex Saab y a Hugo Carvajal dos hombres muy cercanos a los asuntos “de palacio” que han sido capturados por las autoridades de otros países. Se espera que sus testimonios revelen o comprueben sospechas de los muchos negocios y actividades ilegales que manejó el régimen. La costosa defensa, y la intensa campaña mediática que realizó Maduro favor de la liberación de Saab, da una buena pista de lo mucho que debe saber y que podría comprometer a Maduro.
4-Las elecciones agridulces. Hace unos días se realizó un proceso electoral de gobernadores, alcaldes y cuerpos legislativos regionales. El resultado fue que el mapa de Venezuela se tiñó de rojo al ganar 19 de las 23 gobernaciones. Hasta allí lo dulce. De seguida los entendidos sacaron cuentas de que los chavistas habían obtenido la menor votación de su historia y que, si se hubiese tratado de un referéndum o una elección presidencial con candidato único, Maduro habría sido derrotado pues, efectivamente, la suma de los votos anti régimen fue mucho mayor. Adicionalmente una comisión de la Unión Europea que observó el proceso declaró sobre las muchas irregularidades promovidas por el régimen que hacían no confiable las elecciones.
5- México lindo. Lo que le viene al régimen es regresar a la mesa de negociación en México con el rabo entre las piernas y presionado por la comunidad internacional y en especial por Rusia quien sabrá Dios que arreglos secretos tiene con los gringos. Volverán a la mesa debilitados, con la certeza del rechazo de los venezolanos mostrada en las elecciones y la evidencia internacional de procesos electorales manipulados. Seguimos creyendo que de estas reuniones pronto saldrá un cronograma para una elección de presidente antes de 2024.
6- Referéndum y olé. Ahora los opositores al régimen se han propuesto realizar un referéndum revocatorio a Maduro quien ciertamente lo ve ahora como un clarísimo peligro. El proceso para convocarlo, inventado por los chavistas, es engorroso y fácil de dinamitar, pero no deja de ser algo de mucho cuidado en especial si esta idea amalgama el propósito colectivo de un desquite contra un régimen del cual ya todos estamos hartos.
7-La CPI una espada en el cogote. El caso de Maduro avanza en la corte penal internacional con decenas de acusaciones de casos concretos de violaciones de derechos humanos. Dicen que estos procesos son largos pero muy peligrosos por sus consecuencias.
“Esito” Maduro, De paso hasta chismean que hay ruidos de cuartel.
Eugenio Montoro