Frudelca: un ejemplo empresarial de explotación sostenible potenciando la riqueza natural de Colombia

El proyecto es responsabilidad de Juan Diego Ospina Baraya, empresario y nieto del ex presidente Mariano Ospina Pérez.

Según la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), Colombia está llamada a ser una de las despensas agrícolas del mundo, con una gran proyección en el mercado nacional que en el año 2019 alcanzó un consumo interno de 9,7 millones de toneladas de fruta, pero también como vendedor en el mercado exterior, ya que Colombia es el principal exportador de frutas exóticas en América.

Gracias a la diversidad de condiciones topográficas y climáticas, el país se beneficia de amplias y variadas cosechas durante todo el año, destacando las producciones que se desarrollan en las 12,5 millones de hectáreas destinadas para la piña, 11,2 millones para el mango o las 8,2 millones para la papaya, sin despreciar la fresa, aguacate o la cebolla.

En este marco incomparable, donde el gobierno desarrolla políticas e iniciativas para fortalecer el sector y generar oportunidades para el crecimiento de las exportaciones, se tornan inevitable nombrar empresas como C.I. Agrícolas Unidos, quienes bajo su marca Frudelca, realizan una apuesta por el producto nacional desde Medellín y haciendo bandera de su patria, sabiendo transformar su extensa producción de frutas de alta calidad para producir, envasar y comercializar jugos naturales, sin adición de conservantes apostando por el consumo de lo natural.

COMPROMISO AMBIENTAL Y SOCIAL

Hoy podemos decir que la marca Frudelca es reconocida a nivel nacional, pero detrás de esta expansión comercializadora se encuentran nombres como el del reconocido empresario Juan Diego Ospina Baraya, propietario de la marca y visionario que ha sabido transformar el fruto de la tierra en negocio, sin darle la espalda a la sostenibilidad y la aplicación de un protocolo de buenas prácticas como la reducción de los consumos de agua y energía en los procesos, el reciclaje o la mínima utilización de agroquímicos, señas de identidad de sus productos que les han convertido en marca líder.

Siguiendo la línea marcada por sus antecesores en el país, en referencia a su abuelo el ex presidente Mariano Ospina Pérez, Juan Diego ha querido que sus tierras no pierdan la vocación social por el campesino, garantizando no solo una amplia oferta laboral, sino unas condiciones dignas en connivencia con las alcaldías regionales y la caja de compensación familiar, desde donde han sacado adelante proyectos habitacionales y educativos de gran calado social.

GRAN VARIEDAD DE PRODUCTOS QUE PONEN EN VALOR A COLOMBIA

Cuando un negocio es prospero y se gestiona correctamente la región o país donde está enclavado es beneficiado por sus éxitos. Esa simbiosis ocurre entre Colombia y Frudelca, la primera le ofrece una fértil tierra y la segunda exporta al mundo la consecuencia de un producto de primera calidad transformado en jugo de naranja, mandarina, limón, toronja o su refrescante limonada perfecta para saciar la sed.

COLOMBIA PUNTA DE LANZA DEL MERCADO DE LOS ZUMOS

Los latinoamericanos tienen el consumo más alto de bebidas azucaradas en el mundo, según un estudio presentado en la reunión anual de la Sociedad Estadounidense de Nutrición en el año 2019. Sin embargo en esa exposición cabe destacar que la ingestión más alta de jugos de fruta a nivel mundial se halló en Colombia, con unos 320 mililitros diarios, seguido por Islandia y Finlandia, donde los adultos toman en promedio unos 260 mililitros diarios. Los niveles más bajos de consumo de los jugos de fruta se registraron en China, Portugal y Japón.

Sin duda Colombia es el país idóneo para invertir en un sector pujante y con mucho recorrido como el de la fruta, y donde Juan Diego Ospina Baraya fue un visionario que aún puede tener mucho que decir en este mercado.

DC

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