Xiomara Castro estaría cerca de convertirse en la primera mujer en llegar a la Presidencia de Honduras.
Con casi el 45% de los votos contabilizados, Castro, esposa del expresidente Manuel Zelaya, obtiene el 53% de los votos a su favor. Se trata de una ventaja de casi 20 puntos sobre Nasry Asfura, el alcalde de la capital y aspirante al Ejecutivo por el Partido Nacional gobernante, quien registra un 34% de respaldo, según el cómputo preliminar del Consejo Nacional Electoral.
En tercer lugar, aparece Yani Rosenthal, del Partido Liberal, con el 9% de sufragios.
De mantenerse la tendencia que favorece a Castro, la candidata devolvería al poder a la izquierda, por primera vez desde que su esposo fue depuesto hace doce años.
«¡Ganamos! ¡Ganamos! (…) Hoy la gente ha obtenido justicia. Hemos dado marcha atrás al autoritarismo. Vamos a formar un gobierno de reconciliación, un gobierno de paz y justicia», declaró la exprimera dama del país frente a sus partidarios, pese a que el conteo no ha finalizado.
Miles de personas abarrotaron el Morazan Boulevard de la capital, haciendo sonar las bocinas de los autos, ondeando las banderas rojas de la bancada Libre y encendieron fuegos artificiales. Después de la medianoche, la calle siguió llenándose de seguidores celebrando a Castro.
Sin embargo, el Partido Nacional también declaró rápidamente la victoria de su candidato, el alcalde de Tegucigalpa, Nasry Asfura.
El aspirante presidencial del oficialismo instó a los votantes a mostrar paciencia en una publicación en las redes sociales.
El representante del Consejo Nacional Electoral (CNE), Kelvin Aguirre, reiteró que el resultado es preliminar y que aún no está determinado quién es el ganador.
La participación en las urnas fue superior a la de 2017
De acuerdo con el CNE, la participación fue de más del 68%. Diez puntos más a la de las pasadas elecciones presidenciales hace cuatro años.
Además de un nuevo presidente, los hondureños eligieron el domingo 28 de noviembre un nuevo Congreso, un órgano unicameral compuesto por 128 diputados, y nuevos representantes en el Parlamento Centroamericano.
La misión de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) señaló mediante un comunicado que las votaciones fueron “apropiadas y pacíficas”.
Las elecciones concluyeron sin violencia, a diferencia de hace cuatro años cuando un cambio repentino en el recuento de votos empañó el proceso y el conteo se detuvo durante horas, lo que causó fuertes protestas. Sin embargo, el portal oficial del CNE registró caídas a lo largo del día.
Los comicios de este año se llevaron a cabo en un contexto de escándalos de corrupción y disturbios sociales en el país centroamericano, alimentados por una economía frágil y la violencia crónica de las pandillas que ha llevado a un número récord de migrantes a abandonar su tierra natal.
France24 con Reuters, AP y medios locales