La pandemia se acerca a sus dos años y, aunque ya existen vacunas y los hospitales han dejado atrás el colapso de 2020, todavía hay batallas por afrontar. Por un lado está el caso de variantes como ómicron, poco letal pero muy contagiosa, y por otro lado el virus paraguas, es decir, el SARS Cov-2, que sigue activo.
“Hoy sabemos bien que la probabilidad de reinfección con la variante Ómicron es muy superior a la reportada con las variantes anteriores. El riesgo de reinfección oscila de 6 a 20 veces más, según la bibliografía”, señaló al medio Chequeado la infectóloga Leda Guzzi, miembro de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI).
Incluso, la variante africana es tan hábil, que puede evadir la respuesta inmune natural producida por el organismo y la que viene de las vacunas, logrando una reinfección en períodos de tiempo más cortos.
“Lo que sugieren los autores es que, en la época pre ómicron, las personas que habían tenido una infección en los últimos 6 meses tenían una protección frente a una reinfección de un 85%. Con ómicron ese mismo grupo pasaría a tener una protección que estaría entre el 0 y 27%”, precisó el virólogo e investigador del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) en Córdoba, Humberto Debat.
Jorge Geffner, doctor en bioquímica e investigador adscrito al Consejo Nacional de investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (Conicet) señaló que “la reinfección por la misma variante en términos acortados de tiempo es poco probable”.
Como se sabe, el Covid-19 ha matado a más de 5,5 millones de personas en todo el mundo, tiene la característica de generar variantes de acuerdo con condiciones específicas de origen endémico. Justamente, esas variantes son las que disparan las reinfecciones.
El problema está en poder levantar la secuencia genética de las dos infecciones para saber el origen de cada una. Muchas personas no se hacen pruebas específicas y pasan el proceso de Covid con los tratamientos existentes. Luego, si vuelven a enfermarse, hacen lo mismo. Como resultado, no se sabrá la identidad de los virus que entraron en ese organismo.
¿Qué hacer?
Además de seguir usando la mascarilla, mantener una estricta higiene de manos y protegerse con las vacunas, todos se preguntan qué más se puede hacer para evitar ser tocado varias veces por el virus.
Los expertos observan que la circulación de variantes de distinto tipo provoca ese riesgo. Por ejemplo, está en circulación la variante delta y también la ómicron en mayor proporción. Es más probable que un paciente recuperado de Covid delta sea víctima de ómicron en corto tiempo.
Es por ello que las autoridades sanitarias luchan por neutralizar las variantes, ya que tienen el poder de reinfectar. Un estudio realizado en Qatar estimó que “la protección que ofrece una infección previa para prevenir la reinfección sintomática con Alfa, Beta o Delta es de alrededor del 90%, mientras que la protección contra la reinfección con Ómicron es del 60%”.
Con todo esto sobre la mesa, no queda otra salida que tratar de estar en las mejores condiciones para enfrentar las nuevas olas, o las endemias futuras. Y ello se logra con una alimentación saludable, el consumo de vitaminas y rutinas de ejercicios.
Con información de Publimetro