El primer ministro francés, Jean Castex, fue el encargado de anunciar los cambios, que supondrán la eliminación de la mayoría de las restricciones una vez llegue el mes de febrero. Esta medida se da en un momento en que la tensión hospitalaria sigue siendo extremadamente fuerte, pero también cuando se ha evidenciado poca efectividad de las medidas tomadas de cara a frenar a la variante Ómicron, mucho más contagiosa que otras variantes del virus.
Francia levantará gran parte de las restricciones vigentes a partir del día 2 de febrero. La ansiada noticia fue dada por el primer ministro de la nación gala, Jean Castex, y contempla un cambio radical de la política de semiconfinamiento que hasta ahora se había contemplado desde el Elíseo.
Las principales medidas pasan por el abandono de los requerimientos de aforo en espacios abiertos desde el 2 de febrero, una medida que entrará en vigor también junto a la eliminación del uso de mascarilla en espacios abiertos. Esta última había generado una gran polémica cuando fue reimpuesta con la llegada de la variante Ómicron incluso para aquellos que ya estaban vacunados con doble dosis.
Para esta fecha también se tiene previsto dejar de contemplar el teletrabajo como obligatorio para las profesiones que puedan realizarlo. Esto podría suponer una vuelta gradual a las oficinas, aunque desde el Gobierno se seguirá considerando este modelo como «recomendable» para evitar los contagios en horarios laborables.
En lo que respecta al ocio, el día señalado para su vuelta será el 16 de febrero. Desde esa fecha, los ciudadanos franceses podrán volver a las discotecas, siempre que presenten su pase de vacunación, y también podrán asistir a los conciertos de música estando de pie, aunque con las mascarillas correctamente colocadas.
Con información de France24