Por su parte, el líder supremo iraní prometió que EE. UU. pagaría por la muerte del comandante.
El presidente de Irán, Ebrahim Raisí, afirmó este lunes que la umma (la comunidad musulmana) se tomará la venganza por su mano si el expresidente estadounidense Donald Trump no es juzgado por el asesinato del general Qasem Soleimaní, de cuya muerte se cumplen dos años.
“Trump, (el exsecretario de Estado) Pompeo y sus cómplices deben ser juzgados por el crimen del asesinato del general Qasem Soleimaní”, afirmó Raisí en la principal ceremonia en memoria del exmilitar, celebrada en la mezquita Mosala de Teherán.
«La umma vengará a Soleimaní si Trump y Pompeo no hacen frente a la justicia”, avisó el presidente.
Raisí realizó estas afirmaciones ante miles de personas en la principal ceremonia para conmemorar la muerte del exgeneral de la Fuerza Quds de los Guardianes de la Revolución iraní (IRGC) en un bombardeo con dron estadounidense el 3 de enero de 2020 cerca del aeropuerto de Bagdad.
En los últimos días ciudades como Teherán se han llenado de cárteles celebrando al exmilitar, a quien el régimen describe como un «héroe», “mártir”, «activista social», «activista contra el cambio climático» y «diplomático», entre otros.
Por su parte, el líder supremo de Irán, Ali Jameneí, prometió que Estados Unidos y en particular Trump pagarán por la muerte de Soleimaní.
“Los asesinos del mártir Soleimaní como Trump pagarán por su crimen”, escribió en su cuenta de Twitter Jameneí, sin explicar cómo. “El mártir Soleimaní es más peligroso para sus enemigos que el general Soleimaní”, afirmó Jameneí.
El aniversario llega en medio de las conversaciones en Viena para rescatar el acuerdo nuclear de 2015 entre Irán y Alemania, Francia, Reino Unido, China, Rusia y Estados Unidos de forma indirecta.
El acuerdo nuclear limitaba el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de las sanciones estadounidenses, pero Washington lo abandonó en 2018 e impuso nueva medidas punitivas contra Irán.
Como respuesta, Teherán comenzó a incumplir los límites impuestos a su programa atómico. Los contactos de Viena tienen un doble objetivo: que EE. UU. regrese al pacto y que Irán vuelva a cumplirlo plenamente.
Con información de El Tiempo / EFE