El presidente argentino, Alberto Fernández, afirmó este sábado que su reciente visita a Rusia y China no tenía intención de afectar las relaciones de su país con Estados Unidos, país con el que su Gobierno desea tener un vínculo «maduro».
«Creemos que debemos tener con los Estados Unidos una relación madura, franca, sincera, de respeto mutuo. Nosotros no hicimos estas cosas (el viaje a China y Rusia) pensando en perjudicar a alguien. Queremos tener esa misma relación con Rusia, China, Chile, Uruguay, Brasil, con Europa y con todos los países que se vinculan a Argentina», dijo el mandatario argentino en declaraciones radiales.
Fernández viajó entre el 2 y el 6 de febrero a Rusia y a China, donde se reunió con los presidentes Vladimir Putin y Xi Jinping, una gira cuya oportunidad fue cuestionada desde algunos medios argentinos, en momentos en que Argentina busca terminar de cerrar todos los términos de un acuerdo de refinanciación de deudas con el Fondo Monetario Internacional (FMI), un proceso en el que EEUU, el mayor accionista del organismo, tiene un papel fundamental.
«Yo no sé por qué esto levantó tanta polvareda y por qué viajar a Rusia y China significa que nosotros queremos tener una mala relación, por ejemplo, con los Estados Unidos. No sé qué tiene que ver una cosa con la otra», dijo Fernández en declaraciones a Radio 10.
El presidente argentino señaló que el mundo es «multilateral» y «obliga» a tener relaciones «maduras y de respeto con todos los países» y que el viaje a Rusia y China tuvo por objetivo «reforzar» los vínculos comerciales y financieros.
FMI Y SUBSIDIOS
Fernández destacó que, así como el Gobierno de Donald Trump (2017-2021) «facilitó» con su voto en el FMI que en 2018 el organismo otorgara a Argentina un crédito por 44.200 millones de dólares «desmedido» y «muy nocivo» para el país suramericano, «en este momento el Gobierno norteamericano, cuando llegó la hora de encontrar un comienzo de salida al problema, acompañó con su voto».
El pasado 28 de enero, el Gobierno de Fernández y el FMI anunciaron un principio de entendimiento con vistas a cerrar un acuerdo definitivo de refinanciación del préstamo otorgado en 2018.
Una vez que estén cerrados todos los términos del acuerdo, el Ejecutivo remitirá el pacto al Parlamento para su aprobación, que también deberá recibir el visto bueno del directorio del FMI.
Este sábado, Fernández se mostró confiado en que la oposición dará en el Parlamento su voto positivo al acuerdo.
El principio de entendimiento anunciado incluye un compromiso de reducción del déficit fiscal de Argentina y de los pesados subsidios estatales que engordan el gasto público.
En este sentido, el Gobierno de Fernández ya dio pasos para reducir los subsidios al consumo de energía eléctrica y ahora plantea hacerlo respecto a los subsidios al transporte de pasajeros en autobús en la capital argentina y su periferia, una posibilidad que el Gobierno capitalino, encabezado por el opositor Horacio Rodríguez Larreta, rechaza.
Fernández dijo que otras zonas del país no reciben estos subsidios y que la ciudad de Buenos Aires, como es autónoma, debe «autofinanciarse».
Fuente: Agencia EFE