El presidente estadounidense, Joe Biden, prometió este jueves la inclusión de Colombia en su lista de principales aliados fuera de la OTAN durante una reunión con su homólogo colombiano, Iván Duque, que tuvo lugar en un momento delicado por los recientes contactos entre Estados Unidos y Venezuela.
Pero Biden quiso disipar cualquier duda sobre la estrecha relación con Colombia y anunció su intención de convertir al país suramericano en aliado principal no OTAN, un estatus especial que conlleva privilegios económicos y militares, y que ostentan 17 países en el mundo.
«Eso es exactamente lo que son ustedes, un gran, gran aliado no OTAN. Esto es un reconocimiento de la relación única y cercana entre nuestros países», apuntó el mandatario durante el encuentro.
Tras la reunión en la Casa Blanca, Duque ofreció una rueda de prensa en solitario en la Embajada de Colombia en Washington, donde sacó pecho de este nuevo estatus que, subrayó, llevará la relación bilateral «al punto más alto en el que ha estado en la historia».
Ante la insistencia de la prensa, Duque confirmó que habló con Biden sobre el tema energético, tras los contactos entre Estados Unidos y Venezuela, y le trasladó que «Colombia es un actor que puede contribuir mucho más» que Venezuela en la estabilización de los precios.
«Colombia hoy es un país que tiene más capacidad de suministrar hidrocarburos de lo que tiene Venezuela», reivindicó el mandatario colombiano, quien destacó que el crudo colombiano supone el 3 % de las importaciones de Estados Unidos.
Además, el líder colombiano reiteró varias veces durante su visita que las conversaciones entre Washington y Caracas no alteran la postura sobre la administración de Maduro y que «Colombia y Estados Unidos no han reconocido el régimen dictatorial como interlocutor».
«Es importante decir que Estados Unidos y Colombia seguimos exigiendo la instauración de la democracia en Venezuela y llamando dictador a Nicolás Maduro», afirmó.
Más allá del tema de seguridad y de Venezuela, en el encuentro también hablaron de los retos migratorios, un asunto que Biden consideró que no puede resolver una sola nación ni solucionarse en una sola frontera: «Tenemos que trabajar juntos».
En ese sentido, adelantó que Estados Unidos quiere firmar una declaración regional sobre protección de la migración el próximo mes de junio en Los Ángeles durante la Cumbre de las Américas a la que acudirán varios jefes de Estado de la región.
Ambos mandatarios expresaron, además, su condena a la invasión rusa por parte de Ucrania.
En ese sentido, Duque afirmó que ha mantenido contactos con la OTAN y los líderes de Polonia, Rumanía y Eslovaquia para «apoyar económicamente con ayuda humanitaria» a Ucrania.
Con información de La Verdad.