El biólogo y activista ambiental Alejandro Álvarez exigió durante el foro regional «Venezuela: Acuerdo de Escazú ya«, realizado este viernes, que Venezuela se adhiera al Acuerdo Regional sobre el Acceso a la Información, la Participación Pública y el Acceso a la Justicia en Asuntos Ambientales en América Latina y el Caribe, mejor conocido como Acuerdo de Escazú.
Álvarez explicó que, según los estudios que han hecho en los últimos 10 años sobre la situación ambiental de Venezuela, se evidencia un deterioro ambiental progresivo.
Dijo que estos resultados pueden evidenciarse en dos grandes problemas. Primero, el acceso al agua potable, que según Álvarez afecta entre 82 y 96% de toda la población venezolana «que no le llega agua ni de manera regular ni su calidad es adecuada para el consumo humano».
De acuerdo con sus datos, esta crisis comenzó a partir del 2014. «En ese año el gobierno nacional dijo que se había presentado la sequía más grande en los últimos 60 años en Venezuela. Desde ese momento el país tiene algunos sitios con extrema crueldad porque llega agua una vez o dos veces al mes, o no llega. No hay información si seguimos en la misma sequía, si hay algún avance para proteger a la población».
En segundo lugar, se refirió a los daños ambientales provocados por la minería al sur del Orinoco, en el estado Bolívar.
Indicó que estas acciones repercuten en daños ambientales como la contaminación de la zona donde se encuentran 80% de los ríos en Venezuela.
«Esto está produciendo un aumento de la malaria en condiciones que no se habían visto desde hace más de 60 años, de hecho, Venezuela está exportando malaria a los países vecinos», expresó Álvarez.
Asimismo, resaltó los constantes derrames de petróleo que «son producidos por la empresa estatal Pdvsa».
Por su parte, el geógrafo e investigador Jorge Padrón explicó que la adhesión de Venezuela al Acuerdo de Escazú es importante para «sacar del atolladero y estancamiento en el cual se encuentra el derecho ambiental en el país».
Fuente: El Nacional