Durante su Asamblea Ordinaria Plenaria, la Conferencia Episcopal Venezolana debatirá este miércoles un “protocolo de prevención de abusos en ambientes eclesiales”. Esto tras señalamientos sobre casos de sacerdotes venezolanos que, pese a ser acusados de abusos, continúan dentro de la Iglesia.
En un reportaje del diario The Washington Post se reveló que los religiosos, acusados de pederastia, no cumplieron una sentencia en la cárcel. Además, se encuentran actualmente ejerciendo en la Iglesia católica venezolana.
Por tal motivo, y luego de dos semanas de silencio, la CEV realizará una rueda de prensa para presentar dicho protocolo, según reseño Monitoreamos.
La investigación del diario estadounidense, llevada a cabo por la periodista Ana Vanessa Herrero en los últimos dos años, examinó 10 casos de denuncias de abuso sexual por parte de sacerdotes a niños, niñas y adolescentes.
En ellos, encontró que muchos de los religiosos acusados y condenados quedaron puestos en libertad antes de cumplir su sentencia. Incluso, hay algunos que ni siquiera pasaron tiempo en prisión. Y, en al menos tres de los casos, a los sacerdotes los aceptaron nuevamente en el ministerio.
Un ejemplo de ello es el del sacerdote Luis Alberto Mosquera, a quien condenaron en 2006 a más de siete años en la cárcel, pero no terminó su tiempo en prisión, pues un juez le concedió la libertad a los dos años y este volvió a la Iglesia en el estado Lara, en donde aún ejerce.
En otro caso, el sacerdote Enrique Castro Azócar resultó detenido en Anzoátegui en 2019 tras ser acusado de abuso sexual de dos menores de edad. Este se declaró culpable y quedó sentenciado a cinco años de prisión. Sin embargo, le dieron una medida sustitutiva de libertad. Como condición para su excarcelación, debía mantenerse lejos de las víctimas, asistir a un psicólogo y presentarse ante el tribunal cada 30 días.
Y aunque aseguraron que quedaría destituido de sus funciones como sacerdote, esto no sucedió y solo lo trasladaron a otra parroquia.
Con información de El Nacional