Carmen Uranga, licenciada en enfermería de 56 años, atendía a una paciente herida en un accidente de tránsito en el ambulatorio de Tamaca, ubicado en el norte de Barquisimeto, cuando familiares de los cuatro heridos —dos hombres y dos mujeres— llegaron hasta el centro de salud y protagonizaron una pelea. El hecho ocurrió el sábado 30 de julio a las 10:30 pm.
Dos médicos y otras dos enfermeras pudieron resguardarse cuando las personas violentas lanzaban objetos y se pegaban con cascos de motos, entre otros objetos contundentes, pero la enfermera Uranga, quien tiene 21 años de servicio en este centro de salud, ponía una vía intravenosa a la paciente, y al voltearse, recibió un golpe en su pierna derecha.
“Desde hace más de cuatro años no tenemos personal de seguridad. Antes había unos policías que estaban allí y hacían rondas, pero más nunca. A eso se le suma la oscuridad porque no tenemos alumbrado, y esto es una boca de lobo que se presta para muchas cosas, como esa trifulca del sábado”, contó vía telefónica a El Pitazo la enfermera Uranga.
A pocos metros del ambulatorio, está el Centro de Diagnóstico Integral (CDI), que tiene casi un año en remodelación, por lo cual la emergencia de adultos está ubicada provisionalmente en lo que fue el estacionamiento de una ambulancia, el cual tampoco existe desde hace 12 años, en el ambulatorio Antonio María Sequera, de Tamaca.
“En el CDI había un médico y una enfermera de guardia, pero al llegar los heridos, el médico que estaba con nosotros y las dos enfermeras del ambulatorio nos acercamos para auxiliar, porque eran varios los accidentados”, explicó Uranga, quien recordó que en el lugar de atención primaria atienden las emergencias pediátricas y obstétricas, mientras que en el CDI se encargan de las de adultos.
Xiomara Guanipa, vecina de Tamaca, exigió a las autoridades seguridad, alumbrado y la pronta reinaguración del CDI, porque el espacio provisional para la emergencia de adultos no es apto ni tiene las áreas necesarias para atender a los pacientes. Además, el alumbrado también es deficiente dentro del ambulatorio.
“Hay una desidia general, de los consejos comunales, de los diputados y concejales. No hay respuesta para la población. Lo que ocurrió el sábado puso en riesgo la vida de todos los que estaban allí. Esto no puede volver a suceder”, opinó Guanipa.
Con información de El Pitazo