Rusia solicitó para este jueves una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU con el fin de abordar la situación en la central ucraniana de Zaporiyia, controlada por sus tropas y que según Moscú está siendo atacada por Kiev.
Así lo señaló a través de Twitter el embajador adjunto ruso ante Naciones Unidas, Dmitry Polyanskiy, que adelantó que se espera que en la cita comparezca por videoconferencia el director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el argentino Rafael Grossi.
Por ahora, la cita no ha sido añadida oficialmente a la agenda de encuentros del Consejo de Seguridad, que este mes está presidido por China.
El pasado sábado, Grossi se mostró muy preocupado por el bombardeo a la mayor planta atómica de Europa y alertó que se está «jugando con fuego» y existe el riesgo de un «desastre nuclear».
En medio de una fuerte tensión en torno a Zaporiyia, Moscú y Kiev se han acusado mutuamente de poner en riesgo la seguridad de la instalación, que el Ejército ruso tomó en los primeros compases de su invasión.
Hoy, los ministros de Exteriores del club de naciones industrializadas del G7 exigieron a Rusia que retire sus fuerzas de la central y de otras plantas en Ucrania y las devuelva al control de las autoridades en Kiev para garantizar un funcionamiento seguro.
«Es la permanencia del dominio ruso sobre la central nuclear la que pone en riesgo la región,» afirmaron los ministros en un comunicado en el que se declararon «profundamente preocupados» por la «seria amenaza» que emana de la ocupación rusa de las instalaciones.
Aunque no ha señalado a responsables, el secretario general de la ONU, António Guterres, calificó este lunes cualquier ataque a un central nuclear como «una misión suicida».
El OIEA lleva meses tratando de organizar una misión de expertos para evaluar la situación de Zaporiyia, algo que por ahora no se ha concretado a falta de los acuerdos necesarios con todas las partes involucradas.
Con información de Agencias EFE