El ex primer ministro y líder opositor de Kenia, Raila Odinga, señaló este lunes que «respeta» pero discrepa «de forma vehemente» del veredicto del Tribunal Supremo, que rechazó su recurso contra el resultado de las elecciones presidenciales del 9 de agosto, lo que da la victoria al vicepresidente, William Ruto.
«Siempre hemos defendido el Estado de derecho y la Constitución. En este sentido, respetamos la opinión del Tribunal, a pesar de que disentimos de forma vehemente sobre su decisión», afirmó Odinga en un comunicado, poco después de que los jueces anunciasen su fallo.
«Nuestros abogados ofrecieron pruebas irrefutables y los hechos estaban de nuestro lado, pero, lamentablemente, los jueces lo vieron de otra manera», añadió el líder opositor.
Aun así, Odinga señaló que «este juicio no es de ninguna manera el final de nuestro movimiento, que nos inspira a redoblar nuestros esfuerzos para transformar este país en una democracia próspera».
En el mismo sentido, la compañera de candidatura de Odinga, la exministra Martha Karua, indicó en su cuenta de la red social Twitter que respetará la decisión del Supremo, si bien ella también destacó su desacuerdo con «sus conclusiones».
Después del rechazo del Supremo del recurso de Odinga, que buscaba la anulación de los resultados electorales, Ruto será investido como nuevo presidente del país el próximo 13 de septiembre.
Ruto se convertirá en el quinto presidente de Kenia desde su independencia en 1963 y reemplazará a Uhuru Kenyatta, que cumple el segundo y último mandato de cinco años permitido por la Constitución, y dio su apoyo a Odinga tras enemistarse con su vicepresidente.
El pasado 22 de agosto, Odinga y Karua impugnaron el resultado de las elecciones, en las que venció Ruto con el 50,49 % de los votos, según las cifras anunciadas el día 15 de ese mes por el presidente de la Comisión Electoral Independiente (IEBC), Wafula Chabukati.
Odinga, de 77 años y que optaba por quinta vez a la Presidencia, recibió el 48,85 % de los sufragios, tildó las cifras de «ilegales».
Su recurso alegaba, entre otras cuestiones, que piratas informáticos irrumpieron en los servidores de la IEBC y «convirtieron, manipularon y arrojaron ilegalmente» formularios utilizados para tabular los resultados de los colegios electorales.
Igualmente, el líder opositor argumentó que Ruto no alcanzó el umbral constitucional del 50 % más uno de los votos válidos emitidos para evitar una segunda vuelta electoral.
Sus alegaciones, entre otras, fueron rechazadas por el Supremo.
Esta batalla legal había sumido a Kenia, un aliado de Occidente clave en la inestable región del Cuerno de África y sede regional de muchas empresas y organizaciones internacionales, en un periodo de incertidumbre, después de las olas de violencia que empañaron los comicios de años anteriores.
Con información de Agencia EFE