Canadá anunció este lunes que adquirirá 88 unidades del caza de combate furtivo F-35 Lightning II, fabricado por la compañía estadounidense Lockheed Martin, en una operación valorada en 19.000 millones de dólares canadienses (14.215 millones de dólares estadounidenses).
Las unidades del F-35, un avión de combate de quinta generación que está ya en operación en las fuerzas aéreas de países como Estados Unidos, Japón, Noruega e Israel, reemplazarán la flota de cazas F-18 que la Real Fuerza Aérea de Canadá opera en la actualidad.
La ministra de Defensa de Canadá, Anita Anand, dijo este lunes al anunciar la compra que las primeras unidades del F-35 serán entregadas en 2026. La totalidad de las 88 unidades adquiridas por Canadá no estarán disponibles hasta 2034.
El Ministerio de Defensa de Canadá señaló que el coste de la operación incluye los aviones de combate, a un precio unitario de alrededor de 85 millones de dólares estadounidenses, así como la construcción de infraestructura en dos bases aéreas.
«Mientras que el orden internacional basado en normas es desafiado en todo el mundo, el F-35 será esencial para proteger los canadienses, mejorará la seguridad en el Ártico así como la soberanía nacional y permitirá a Canadá a cumplir sus futuras obligaciones con OTAN y NORAD», explicó el Gobierno de Canadá en un comunicado.
La adquisición del F-35 representa un giro de 180 grados con respecto a la posición que el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, defendió en 2015 y 2016 cuando se opuso a la compra del avión que había iniciado el anterior Gobierno del Partido Conservador.
Entonces, Trudeau declaró que el F-35 no funcionaba y que no cumplía los requisitos de Canadá.
El año pasado, el Gobierno de Trudeau anunció que había iniciado negociaciones con Lockheed-Martin para la adquisición del avión de combate.
Países como Alemania, Australia, Bélgica, Dinamarca, Italia, Japón y Polonia también han iniciado el proceso de compra del F-35 para sus fuerzas aéreas.
Con información de EFE