El gobierno de Trinidad y Tobago espera que en marzo puedainiciar las negociaciones formales con Venezuela para desarrollar el proyecto gasífero en el campo Dragón, un yacimiento ubicado en la Península de Paria, estado Sucre.
Así lo manifestó el ministro de Energía de Trinidad y Tobago, Stuart Young, quien espera que el acuerdo firmado con Venezuela pueda ayudar a reactivar la producción de gas en la nación caribeña, ya que sería insumo para la industria petroquímica y de gas natural licuado.
Young detalló sus estimaciones sobre una dinamización de las negociaciones para llegar a un acuerdo en el que se incluya a Petróleos de Venezuela y la empresa británica Shell, que actualmente produce gas en Trinidad y Tobago, reseñó la agencia Reuters.
Además, el ministro de Energía trinitario prevé hacer una ronda de conversaciones con el gobierno estadounidense en Bahamas y luego viajar a Houston en marzo para reunirse con funcionarios de Estados Unidos.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos otorgó una licencia a Trinidad y Tobago para desarrollar un yacimiento de gas ubicado en aguas territoriales venezolanas, dijo en enero un alto funcionario de la administración de Joe Biden.
El funcionario comentó que «al régimen de Maduro no se le permitirá recibir ningún pago en efectivo de este proyecto» y que todas las sanciones estadounidenses restantes permanecerán sin cambios y aún se aplicarán.
Posteriormente, el primer ministro trinitario, Keith Rowley, se puso en contacto con Venezuela y pactó reuniones exploratorias para intentar alcanzar un acuerdo mediante el cual puedan importar gas venezolano. Para inicios de febrero, el ministro Young sostuvo reuniones con la vicepresidenta Delcy Rodríguez y el ministro de Energía, Tareck El Aissami, para buscar explotar el campo Dragón.
El campo Dragón, es un yacimiento gasífero ubicado en la Península de Paria, estado Sucre. Fue descubierto en 1985 y pertenece a Pdvsa, por lo que cualquier proyecto conjunto debe pasar por la autorización de la estatal venezolana, pese a que debido a la falta de inversión, el proyecto lleva inactivo más de una década.
Desde 2020 el tren de licuefacción de Trinidad y Tobago ha tenido problemas operativos debido a la baja capacidad de producción de gas en el país, por lo que en los últimos tres años, han insistido en la búsqueda de nuevas fuentes gasíferas para alimentar a su industria energética y así producir insumos petroquímicos para exportar.
Con información de Versión Final.