Al menos 330 personas han muerto y 3 mil 200 han resultado heridas como consecuencia de los enfrentamientos entre el Gobierno de Sudán y el grupo paramilitar de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) desde el pasado sábado.
Esto, según el reporte de la oficina de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el Mediterráneo Oriental.
La organización dio a conocer un informe este jueves 20 de abril por el director regional de la OMS, Ahmed Al Mandhari, reseña Swissinfo.
El representante del organismo internacional señaló que “los informes de agresiones sexuales a trabajadores humanitarios internacionales son también muy preocupantes, al igual que los informes de ataques a la asistencia sanitaria, incluidas agresiones a trabajadores sanitarios, ocupación militar de hospitales, saqueo y secuestro de ambulancias”.
Según el Ministerio de Sanidad en cifras que recoge EFE, 20 hospitales se han visto obligados a cerrar debido a los ataques o a la falta de recursos. Otros 8 centros de salud corren el riesgo de cerrar debido al cansancio del personal o a la falta de médicos y suministros.
La OMS también destacó que actualmente circulan por el país “múltiples brotes de enfermedades, como el sarampión, el poliovirus, el primer brote de dengue de la historia en Jartum y el aumento de los casos de paludismo en todo el país”.
Antes de la crisis actual, 15,8 millones de personas en Sudán (un tercio de la población) necesitaban ayuda humanitaria. Pero ahora están observando “un deterioro traumático de lo que ya es una situación humanitaria muy difícil”.
Con información de Radio Fe y Alegría.