La refinería El Palito, ubicada en Carabobo, estará operando “a plena capacidad” dentro de dos meses, informó la empresa de ingeniería estatal iraní Nioec, la cual está realizando reparaciones críticas en la instalación.
“Algunas de las unidades de refinación ya comenzaron a funcionar luego de la finalización de reparaciones importantes”, dijo Farhad Ahmadi, director ejecutivo de Nioec, aseverando que “todavía hay trabajo en curso en varias otras unidades, incluida la columna de destilación y la unidad de destilación al vacío (VDU)”.
Ahmadi aseguró que todo el trabajo de reparación se completará y que la refinería estará “totalmente operativa, todo dentro de los próximos dos meses”.
Nioec, una subsidiaria del operador de refinería estatal iraní Niordc, está dirigiendo trabajos de reparación en El Palito como parte de un acuerdo firmado en mayo de 2022 entre Teherán y Caracas para suministrar a Venezuela equipos y experiencia para renovar la instalación.
El ministro de Petróleo de Irán, Javad Owji, dijo anteriormente que, como parte de esos acuerdos, Irán planea enviar hasta 100 mil barriles de petróleo diario (bpd) de su crudo para refinar en El Palito.
La refinería estuvo fuera de servicio durante gran parte de los últimos 10 meses después de que las unidades de procesamiento clave sufrieron daños en agosto, supuestamente, por el crudo iraní que no cumplía con las especificaciones de la refinería.
Pdvsa, para ese entonces, dependía más de sus refinerías Amuay, de 635 mil bpd; y Cardón, de 305 mil bpd, pero estas han sufrido repetidos cortes de energía, incendios y problemas relacionados con el compresor.
Una fuente con sede en Venezuela reveló a Argus la semana pasada que El Palito estaba pasando por un “mantenimiento importante”, pero precisó que algunas unidades estaban operativas y producían alrededor de 20 mil bpd de diésel y gasolina combinados.
No obstante, la refinería El Palito todavía carece de suficiente crudo, especialmente de grados más ligeros en Apure y Barinas, dijo el diputado oficialista Elbano Sánchez.
Se necesita más trabajo antes de que la planta, acosada por los problemas de mantenimiento que están abordando los iraníes, pueda ponerse en marcha, dijo Sánchez, aun así, “habrá más gasolina en los próximos días”.
El acuerdo centrado en el downstream de mayo de 2022 se basó en una cooperación existente entre los dos productores de la Opep afectados por las sanciones que vieron a Irán apoyar la recuperación de la producción de crudo de Venezuela desde mínimos de alrededor de 500 mil bpd a principios de 2021.
Irán estaba enviando cargamentos de condensado para diluir y mejorar el crudo extrapesado de la Faja del Orinoco de Venezuela a un grado exportable. El último envío, según Vortexa, fue un cargamento de 2,05 millones de barriles de condensado de South Pars que se descargó en la terminal de Jose, de Venezuela, el 23 de abril.
Argus estimó la producción de crudo venezolano en 790 mil bpd en mayo, alrededor de 45 mil bpd por debajo de la propia estimación de Pdvsa.
Con información de La Verdad.