A escasos seis días de los actos en conmemoración por el Bicentenario de la Batalla Naval del Lago de Maracaibo, la cual selló la independencia de Venezuela, el estado del cuerpo de agua aún da de qué hablar y esta vez en El Bajo, municipio San Francisco, donde la economía y la salud de los habitantes de la zona es afectada por los derrames petroleros.
Joseiri Gotera, propietaria de la procesadora Emmanuel, en la playa homónima, denunció que ella y al menos cuatro Consejos de Pescadores y Acuicultores (Conppa) padecen la problemática que presentan desde hace varios meses con los derrames petroleros y aún no tienen respuestas de los entes encargados.
“Ya nos dirigimos directamente al Ministerio Público y formulamos la denuncia para que iniciaran las investigaciones y los responsables respondan ante los afectados”, indicó la empresaria.
Gotera comentó que su procesadora de camarones lleva “más de ocho meses totalmente paralizada”, situación que obligó a las más de 150 mujeres que procesaban para ella que se fueran de la empresa.
“En un día podía pescar hasta mil kilos de camarón. Hoy sacan poquito, 30 o 40 por ciento de esa cantidad”, destacó la propietaria, quien añadió que los pescadores lo único que consiguen es el hidrocarburo y ahora el verdín porque el 70 u 80 por ciento de la potencial mercancía está lleno de carburante. “Por lo menos el producto que viene lleno de petróleo no se puede procesar, no se puede vender y se debe desechar totalmente. Una pérdida total”.
El detrimento no solo es por la mercancía ya que las redes que utilizan también sufren daños, pues solo se puede pescar una vez y una malla para camarones puede oscilar los cinco mil dólares porque es necesario colocarle plomo y corcho aparte. Mientras las que se utilizan para atrapar los pescados su costo puede estar entre los dos mil y tres mil dólares. Hasta la fecha Gotera contabiliza, al menos, 15 redes perdidas.
“Creo que más. Ya no hemos comprado, de verdad no tenemos la manera y para qué seguir arriesgándonos y hacer ese gasto, porque ya no es una inversión ya que no recuperarás el dinero, sencillamente no vale la pena”, comentó.
El pasado 15 de julio Josué Lorca, ministro de Ecosocialismo, visitó San Francisco. Verificó la situación y “prometió soluciones” al problema.
“Luego en sus redes declaró que el Lago no estaba contaminado, que solo un porcentaje mínimo, un siete por ciento, algo así, estaba lleno de verdín y ni de petróleo habló. Vino él mismo (Lorca), vino hasta mi playa, me visitó y vio con sus propios ojos el problema del petróleo, mis redes, mis botes, vio todo eso”, subrayó Gotera.
José Luzardo, presidente de Conppa del Sur, no escondía su enojo ya que la situación que actualmente vive el sector El Bajo llevó a los pescadores a cambiar sus redes por un rastrillo para limpiar patios en casa ajena y llevar comida a sus hogares.
“Anteriormente agarrábamos 300 o 400 kilos de pescado y 100 o 200 kilos de camarón y podíamos resolver nuestros problemas, pero ahora no se puede hacer”, señaló el vocero de los pescadores.
Luzardo aseguró que el pescado muere a causa del petróleo. Incluso las garzas y otras especies, como las tortugas, se ven afectadas por el hidrocarburo.
“Todos los días vais y conseguís 20, 30, 40 y hasta 100 pescado abollaos. Una garza que está arriba por encima de los niveles del Lago y mire como está llena de petróleo. Eso se está muriendo. Hay que limpiarla. Hemos agarrado tortugas que se han muerto, hemos agarrado mucho pescao muerto”, indicó el pescador con una garza manchada justo a su lado.
Pero los animales no son los únicos que presentan problemas por la contaminación, pues el pescador denunció que en el sector hay enfermedades, específicamente, de la piel, pues cuando no hay agua en la zona, dependen del vital liquido del estuario para bañarse, algo que ahora no pueden hacer por el estado del Lago.
A juicio del Conppa del Sur la pesca en el sector redujo su producción en un 90 por ciento.
“Con todo respeto que se merece el ministro (Lorca) él debe estar loco porque él dijo en una nota de interés que esto no está afectado, que esto no está contaminado, que aquí no hay petróleo. Por eso yo le digo que le cambio mi playa por su casa, yo me voy a vivir en su casa y él que se venga a la playa para que vea que no dura dos días. Se tiene que ir”, acotó Luzardo.
Con información de Foco Informativo