Venezuela ha transitado por niveles de pobreza que alcanzaron máximos históricos entre 2019 y 2021, de acuerdo con información recabada por la ONG Provea.
En una nota de prensa, la ONG señaló que a medida que avanzó «la gestión de Nicolás Maduro, el deterioro en las condiciones de vida de los venezolanos creció, dando un salto significativo a la desigualdad e inequidad, aunque hubo una leve disminución de la pobreza en 2022».
Datos de la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Encovi) advirtieron hace algunos meses que Venezuela es el país con mayor desigualdad socioeconómica en América Latina. La población más rica del país tiene un ingreso individual 70 veces más alto que la población pobre: mientras unos reciben 7,9 dólares mensuales, otros reciben hasta 552,2 dólares.
Pero la gran mayoría en Venezuela se encuentra en el grado de la pobreza. Según la Encovi, 8 de cada 10 venezolanos no tiene ingresos suficientes para adquirir la cesta básica alimentaria.
Estadísticamente, la desigualdad de un país se mide por el Índice de Gini, que evalúa la relación entre la cantidad de población que tiene una nación y la distribución de los ingresos. Si el índice tiene un valor cercano a uno, más desigual es el país. En el caso de Venezuela, el índice de Gini es de 0,603 unidades, el más alto de la región latinoamericana.
La administración pública de Nicolás Maduro tiene más de un año sin aumentar el sueldo mínimo, en un contexto donde la inflación supera los 30 puntos porcentuales mensualmente, según el Observatorio Venezolano de Finanzas.
«Los compromisos asumidos por el Estado venezolano en la Declaración de Nuevo León de 2004, dirigidos a la búsqueda del crecimiento económico sostenido y equitativo que contribuya al desarrollo de largo plazo reduzca la pobreza, elimine el hambre y eleve los niveles de vida de la población se han convertido en letra muerta», señaló Provea.
Con información de El Nacional