Manuel Antonio Garbán Hernández, de 57 años, murió primero. Cuando hallaron su cadáver en una vivienda en Prados del Este, el lunes 16 de octubre, tenía una data de tres semanas, aproximadamente. Autoridades aseguraron que cayó por unas escaleras luego de desmayarse, presumen a causa de un infarto.
El hombre vivía junto a su madre Irene Hernández de Garbán, de 87 años, en una quinta llamada «Irene», ubicada en la calle San José con avenida El Parque.
La mujer, quien presentaba problemas para caminar, se vio imposibilitada de socorrerlo y tampoco pudo llamar a nadie. Murió a los días del fallecimiento de su hijo, su cuerpo quedó muy cerca del otro cadáver.
La ausencia de ambos no fue notada, ya que, según vecinos, no los conocían porque no salían. Un vigilante entrevistado alegó que tampoco los vio nunca. El fuerte olor que provenía de la residencia alertó a los residentes, quienes llamaron a funcionarios de la Policía de Baruta.
Vecinos de Prados del Este no los veían
Se activó también una comisión de Protección Civil del municipio, funcionarios ingresaron a la residencia en presencia de representantes de la junta de condominio y otros vecinos, y hallaron los cuerpos.
Se conoció que Manuel Garbán sufría de demencia. Autoridades también informaron que dentro de la vivienda había, aproximadamente, 40 bolsas negras llenas de basura, excremento y enseres en uso y averiados en cantidad. En la cocina solo alimentos enlatados.
«Nunca les vi la cara», indicó un vecino entrevistado por El Pitazo. Ambos cuerpos permanecen en la morgue de Bello Monte sin ser reclamados, ya que tampoco se les conocía familia o amigos.
Integrantes de la junta vecinal comunicaron que están en busca de Irene Alexandra Garbán Hernández, hija y hermana de los fallecidos, quien sería la única autorizada a darles sepultura y ocuparse de la vivienda.
Con información de Foco Informativo