El sector industrial confía en una recuperación importante de la economía venezolana en 2024 si se mantiene la flexibilización de sanciones implantada por Estados Unidos.
En este sentido, Conindustria proyecta que Venezuela podría llegar a producir 1.035.000 barriles de petróleo por día durante el próximo año, un aumento de 44,4% del bombeo de crudo que conduciría a un promedio de exportaciones petroleras de 942.000 barriles diarios, que representarían un alza de 31,7% frente al dato que maneja el gremio para este ejercicio.
En consecuencia, el ingreso petrolero venezolano escalaría a 25.783 millones de dólares en 2024, un incremento de 56,7% frente a la estimación de 16.541 millones de dólares que estima Conindustria que PDVSA generaría este año.
En general, el sector industrial valora casi que en consenso como positivo el levantamiento de sanciones, por parte de Estados Unidos, con un apoyo de 98%, según la Encuesta de Coyuntura Industrial de Conindustria correspondiente al tercer trimestre del año.
Para Luigi Pisella, presidente del gremio industrial, se abre un panorama optimista para la economía a raíz de este cambio de estrategia, por parte de Washington. «Ahora Venezuela podrá vender petróleo en sus mercados naturales y sin descuentos. Además, es importante que se haya habilitado al Banco Central de Venezuela para recibir esas divisas, lo que tendrá un impacto importante en el mercado cambiario», dijo el máximo dirigente del gremio manufacturero.
Otro elemento que Pisella rescató es que se podrán invertir 1.200 millones de dólares en mejorar el funcionamiento de la infraestructura eléctrica del país, «con la participación de un organismo multilateral que va a supervisar el uso de estos fondos».
El presidente de Conindustria claramente hizo referencia al fondo humanitario que había sido acordado en las reuniones de México entre una delegación del gobierno del presidente Nicolás Maduro y un sector de la oposición venezolana, pero que no ha sido liberado.
Este fondo de alrededor de 3.000 millones de dólares debe destinarse a iniciativas que efectivamente mejoren la calidad de vida de la población.
Por otra parte, Pisella hizo referencia a una propuesta de alianzas estratégicas para que el sector privado participe en el sector eléctrico nacional, pero no aportó más detalles debido a que se está evaluando.
Los datos de la encuesta indican que 93,7% de las empresas industriales dependen en mayor o menor grado del suministro del Sistema Eléctrico Nacional (SEN); sin embargo, 78,9% de las compañías encuestadas tiene instaladas plantas eléctricas que funcionan con gasolina o gasoil.
«Este también es un problema, porque tenemos un suministro de combustible muy limitado», señaló Pisella al margen.
Esta situación ha originado que 9% de las empresas industriales opte por plantas eléctricas que funcionan con gas natural
Por otra parte, el Sistema de Información Estadística de Conindustria (SIEC) actualizó los datos promedio de remuneración en el sector industrial. El salario promedio del personal obrero en la manufactura alcanzó un promedio de 199 dólares mensuales al cierre del tercer trimestre del año.
Este monto se incrementó 5% en comparación con el trimestre anterior.
Si se desglosa por tamaño de industria, un obrero en la pequeña industria obtuvo una remuneración promedio de 196 dólares mensuales; en el estrato mediano el salario promedió 206 dólares mensuales, mientras que en la gran industria la remuneración promedio fue de 205 dólares.
En resumen el diferencial entre el mayor y el menor salario percibido fue de 5,10%, lo que parece indicar que, al menos en este aspecto -medular, por cierto en las condiciones actuales de la economía- no hay una gran diferencia intersectorial.
Igualmente, el hecho de que la mediana empresa industrial tenga un promedio de remuneraciones levemente superior al de la gran industria, se debe a que este fue el único estrato que creció, en términos anualizados, durante los primeros 9 meses de 2023.
Esto dicen los datos revelados por Conindustria:
Sin embargo, en el tercer trimestre, el sector grande se recuperó, pero no lo suficiente para terminar con un saldo positivo para terminar con leve descrecimiento de 0,7% en comparación con el mismo lapso de 2022.
Además, el sector mediano elevó su tasa de crecimiento a 11,5% entre julio y septiembre pasados; pero el estrato pequeño profundizó su caída hasta 29,2% en comparación con el tercer trimestre de 2022.
Luigi Pisella, presidente de Conindustria, dijo que la industria se esfuerza por mejorar las remuneraciones de sus trabajadores, en la medida en que el comportamiento del sector lo permite y expresó el dilema es que en el sector pequeño de la manufactura se genera un mayor volumen de empleo.
Fuente: Banca y Negocios