Un apretón de manos entre el presidente guyanés, Irfaan Ali, y el gobernante venezolano Nicolás Maduro, selló el jueves el acuerdo entre Guyana y Venezuela, en el que ambas naciones aprobaron una declaración conjunta sobre nueve puntos que incluye la continuidad del diálogo y abstenerse de intensificar, mediante palabra o de hecho, cualquier conflicto o desacuerdo derivado de cualquier controversia.
Así lo detalla el documento que divulgó Maduro la noche del jueves, en el que quedaron precisados los puntos del acuerdo que establece, en primer lugar, el compromiso de ambas naciones a no amenazarse ni usar la fuerza en ninguna circunstancia, «incluidas las derivadas de cualquier controversia existente entre ambos Estados».
El punto número dos establece que cualquier controversia entre los dos Estados «se resolverá de conformidad con el derecho internacional, incluido el Acuerdo de Ginebra de febrero de 1966».
El acuerdo número cuatro detalla que Guyana y Venezuela tomaron nota de las posiciones sobre el rol de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), un punto acerca del que el mandatario guyanés se refirió en rueda de prensa, tras la reunión y antes de la divulgación del documento aprobado por las partes. Ali dijo que la decisión de la CIJ sobre la disputa territorial deben respetarla las partes.
El sexto punto del acuerdo entre Guyana y Venezuela, referido a que ambas partes se abstendrán de intensificar cualquier conflicto, establece que, en caso de que se produzca un incidente, los Estados se comunicarán de inmediato entre sí, con la Comunidad del Caribe (Caricom), la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), así como con el presidente de Brasil, para contener, revertir y evitar que se repita.
Asimismo, ambos Estados acordaron establecer en lo inmediato una comisión conjunta de los ministros de Relaciones Exteriores y técnicos de ambos países para «tratar mutuamente los asuntos acordados». «Una actualización de esta comisión conjunta será presentada a los presidentes de Guyana y Venezuela en un plazo de tres meses».
El acuerdo establece, además, que el presidente pro-tempore de la Celac, el primer ministro Ralph Gonsalves, el presidente de Caricom, Roosvelt Skerrit, y el presidente de Brasil, Lula da Silva, «seguirán ocupándose del asunto como interlocutores». El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, fungirá de observador del proceso, «con la concurrencia permanente» de Irfan y Maduro.
En el noveno punto, ambos Estados acordaron reunirse de nuevo en Brasil en los próximos tres meses o en otro momento acordado, «para considerar cualquier asunto con implicaciones para el territorio en disputa, incluida la mencionada actualización de la comisión mixta».
En los puntos restantes, diez y once, los Estados manifestaron su acuerdo en agradecer la mediación de todos los involucrados en la convocatoria a la reunión celebrada el jueves y en el encuentro cara a cara entre los representantes de ambos países. Asimismo, expresaron su agradecimiento al gobierno de San Vicente y las Granadinas por la facilitación y hospitalidad.
¡Buena jornada de diálogo! Aquí les comparto el documento con la Declaración Conjunta aprobada por todas y todos los asistentes al diálogo de alto nivel en San Vicente y las Granadinas. ¡Lo logramos! pic.twitter.com/Gn4m5JQLqE
— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) December 15, 2023
Con información de El Pitazo.