La Policía de Ecuador capturó a siete personas -tres de ellos extranjeros- presuntamente integrantes de la banda criminal Los Lobos, catalogada por el Gobierno como terrorista, y en cuyo poder tenían dinamita de origen peruano, y tres policías secuestrados fueron liberados.
La captura de los delincuentes se dio en la noche de este miércoles en la ciudad de Ibarra, tras una alerta recibida en el servicio integral de emergencias ECU 911, indicó la Policía en un comunicado en el que tilda de «terroristas» a los detenidos.
Según la institución policial, los detenidos circulaban por la vía Urcuquí (provincia de Imbabura), en una camioneta custodiada por dos motocicletas, cuando fueron detenidos por los policías, quienes constataron que transportaban dinamita.
La Policía presume que ese material tenía relación con un reporte en el sector de Imbaya (Imbabura), en donde encontraron dos vehículos con varios explosivos y cilindros de gas.
«También se pudo evidenciar, a tres metros de distancia, dos cargas explosivas, la primera conformada por 13 cartuchos de explosivos de alto poder de origen peruano», detalló el escrito.
Los mencionados automóviles estaban reportados como robados en las ciudades de Machala, próxima a la frontera con Perú, y a capital Quito.
La detención de las siete personas se dio en momentos de alta tensión en el país por una serie de ataques y acciones perpetradas por bandas del crimen organizado.
Liberan a 3 policías
La Policía ecuatoriana informó también de la liberación de tres agentes, quienes habían sido secuestrados por «presuntos terroristas» en la provincia de Los Ríos.
Los policías fueron liberados con vida en la noche del miércoles en el sector de Valencia, y entregados a sus familiares, indicó la Policía en un comunicado.
Los policías fueron secuestrados la mañana del martes mientras cumplían con su servicio, y una vez ocurrido el hecho, se activaron las unidades policiales para localizarlos, así como identificar a los responsables de este delito y ponerlos a órdenes de las autoridades correspondientes.
Tras levantar información con las primeras acciones de investigación, y mientras se realizaban patrullajes preventivos, cinco sujetos que iban a bordo de un taxi empezaron a disparar y se produjo un enfrentamiento y una persecución que no dejó víctimas, relató la Policía.
A la altura del sector de San Pablo, en el cantón (municipio) de Valencia, se logró ubicar tres vehículos que habrían sido utilizados por los delincuentes, quienes lograron huir del lugar.
La Policía ha ejecutado alrededor de diez allanamientos, mientras las investigaciones continúan para localizar a los responsables del secuestro.
«Los delincuentes dejaron en libertad a los tres policías al sentirse presionados por las diferentes intervenciones operacionales que venía ejecutando la Policía Nacional», anotó la institución.
Con información de La Verdad