El Fidesz, que gobierna con mayoría absoluta en Hungría, anunció hoy que no participará en el pleno del lunes para debatir la entrada de Suecia en la OTAN y que la ratificación no se producirá antes de que se reúnan su líder y primer ministro, Viktor Orbán, con su homólogo sueco, Ulf Kristersson.
El partido del Gobierno ultranacionalista ha anunciado que no participará en el pleno extraordinario convocado por la oposición para el próximo lunes para debatir la entrada de Suecia en la OTAN, a la que han dado su visto bueno todos sus países miembros menos Hungría.
El Fidesz, en el poder desde 2010, ha indicado que la votación final sobre la adhesión sueca no se celebrará hasta que se reúnan los primeros ministros de los dos países, un encuentro para el que aún no hay fecha, informa la emisora húngara ATV.
El boicot del Fidesz al pleno del lunes, convocado por la oposición liberal, significa que no habrá cuórum para tomar ninguna decisión.
El Fidesz y sus aliados del KDNP suman 135 de los 199 diputados de la Asamblea Nacional el Parlamento unicameral de Hungría.
El Gobierno de Orbán considera que no hay «ninguna razón» para tratar la ratificación de la ampliación de la OTAN en una sesión extraordinaria.
Hungría y Turquía bloquearon durante más de un año la integración de Suecia a la OTAN, pero después de que Ankara la ratificara la semana pasada Budapest ha quedado solo, a pesar de que anteriormente aseguraba que no iba a ser el último país en dar su visto bueno.
Los ministros y diputados del Fidesz justifican su negativa con las críticas «injustas» de Suecia contra Hungría sobre la deriva de los valores democráticos en el país.
Fuente: EFE