Irán inició la noche del sábado un ataque contra Israel, lanzando más de 300 drones y misiles de diversos tipos, pero Tel Aviv dice haber interceptado la inmensa mayoría de los objetivos, alrededor del 99 %.
Según una declaración de Daniel Hagari, portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), la «amenaza iraní» tropezó con la «superioridad aérea y tecnológica del Ejército» del país hebreo.
De más de 120 misiles balísticos, solo unos pocos cruzaron a territorio israelí. Estos cayeron en la base aérea de Nevatim, situada en el distrito Sur del país, causando daños menores a la infraestructura.
El militar detalló que «Francia dispone de muy buena tecnología, aviones, radares», y que sus fuerzas «contribuyeron a patrullar el espacio aéreo» el sábado. Sin embargo, añadió que no disponía de detalles exactos sobre si los aviones del país europeo habían derribado alguno de los misiles lanzados por Irán.
Por su parte, Reuters informó, con referencia a fuentes de inteligencia occidentales, que los aviones israelíes y estadounidenses derribaron decenas de drones iraníes sobre el espacio aéreo sirio.
Al mismo tiempo, la agencia reportó, citando a dos fuentes de seguridad regionales, que las fuerzas aéreas jordanas interceptaron y derribaron decenas de drones iraníes que violaron su espacio aéreo y se dirigían a Israel. La cadena iraní de noticias Press TV, a su vez, indicó que al menos diez países ayudaron a Israel a contrarrestar la ofensiva.
El sistema Patriot, el miembro más antiguo del sistema de defensa antimisiles de Israel, fue utilizado durante la Primera Guerra del Golfo en 1991. Actualmente, los Patriot se utilizan para derribar aviones, incluidos drones.
Por su parte, la Cúpula de Hierro se especializa en derribar cohetes de corto alcance y ha interceptado miles de cohetes desde su activación a principios de la década pasada. Israel afirma que tiene una tasa de éxito superior al 90 %.
Además, Israel está desarrollando el sistema Rayo de Hierro para interceptar amenazas entrantes con tecnología láser, que promete ser un cambio de juego por su bajo costo operativo.
«Los habitantes de los territorios ocupados, las autoridades sionistas y el Ejército terrorista, así como los ocupantes del régimen sionista y Estados Unidos han reconocido y comprendido mejor que nosotros los efectos devastadores de estos golpes», señaló.