El presidente de Colombia, Gustavo Petro, pidió este viernes a los funcionarios señalados de corrupción dejar sus cargos tras asegurar que amaneció con una «noticia fea» después de que un exfuncionario revelara que utilizó dinero de la estatal Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) para pagar millonarias coimas.
«Funcionarios, sobre los cuales hay fuertes indicios; no puedo ser yo el juez de corrupción en el Gobierno del Cambio», dijo el mandatario en el acto de entrega del proyecto de una planta procesadora de arroz en el municipio de Palermo, en el departamento del Huila.
«Esos son funcionarios sobre los cuales no puedo hacer procesos judiciales porque, encima, me dirían dictador, con razón. De todas maneras, deben salir por los indicios que acarrean las investigaciones que la prensa o nosotros o la Justicia haga», insistió Petro.
Sneyder Pinilla, quien hasta el pasado 6 de marzo fue subdirector de Manejo de Desastres de la UNGRD, denunció este viernes haber usado dinero estatal para pagar coimas al presidente del Senado, Iván Name, y al de la Cámara de Representantes, Andrés Calle, con el fin de que se aprobaran en el Congreso las reformas sociales presentadas por el Gobierno.
La denuncia ha causado revuelo en el país porque no solo involucra a los presidentes del legislativo sino que salpica al Gobierno del presidente colombiano.
En este sentido, Petro dijo: «Ya sabemos que la marca política, el color de la bandera, no inhibe el que este tipo de cosas se produzcan en cualquier ser humano. Esto de la codicia rápida daña el corazón, se vista de rojo, se vista de azul o se vista de multicolor».
«Establecen agendas paralelas cuyo objetivo no es cumplir el programa de gobierno, que es a lo cual los hemos convocado, sino que transforman ese objetivo en otro que es enriquecerse rápidamente y, al querer hacerlo, dañan, se tiran el programa del Gobierno y nosotros no tenemos tiempo para perderlo de esa manera», apostilló el jefe de Estado.
Pinilla reveló en una entrevista con la revista Semana que en septiembre y octubre del año pasado utilizó dinero de la UNGRD para pagarle en efectivo a Name 3.000 millones de pesos (unos 767.000 dólares de hoy) y 1.000 millones de pesos (unos 256.000 dólares) a Calle para que apoyaran las reformas de la salud, pensiones y laboral, que sin embargo siguen estancadas.
Ese dinero supuestamente lo dio un contratista al que el Gobierno le encargó la compra de decenas de camiones cisterna para abastecer de agua al departamento caribeño de La Guajira, un proyecto que acabó siendo un fiasco porque los vehículos adquiridos no cumplían las condiciones técnicas, entre otras fallas.
Este escándalo habría motivado, según la información de medios locales, la salida del Gobierno del secretario de Transparencia, Andrés Idarraga, y la alta consejera de Regiones, Sandra Ortiz, quienes estarían salpicados por esta trama de corrupción.
En una entrevista con Semana, Pinilla dijo que la alta consejera para las regiones fue la persona que fungió como «mensajera» del senador Name, opositor de Petro, para la entrega del dinero que estaba en maletas negras repletas de billetes de 50.000 y 100.000 pesos.
Fuente: EFE