El nuevo ministro de Relaciones Exteriores de Argentina, Gerardo Werthein, ha comenzado su gestión pidiendo la renuncia de toda la alta dirección de la Cancillería. Esto se hace con el objetivo de identificar a los diplomáticos considerados “traidores” y “enemigos de las agendas de la libertad”. El Gobierno anunció que realizará una evaluación individual de cada funcionario para decidir su permanencia o salida.
Esta solicitud se presenta en un contexto de tensiones luego de la destitución de la exministra Diana Mondino, quien votó en la ONU a favor de levantar el bloqueo a Cuba, una postura que ha sido tradicional en Argentina.
El presidente Javier Milei afirmó en una reciente entrevista que “todos los responsables van a ser sumariados y echados”. También expresó que quienes deseen gobernar deben ganar elecciones, calificando a los que apoyan posturas diferentes como “traidores a la Patria”.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, aclaró que esta polémica decisión no implica la expulsión inmediata de todos los secretarios y subsecretarios de la Cancillería. Realizó énfasis en que el trabajo de Werthein incluirá una reestructuración necesaria en las distintas áreas del Gobierno.
Es importante mencionar que, el pasado 18 de octubre, el presidente Milei había enviado una carta al personal diplomático pidiéndoles adoptar el nuevo enfoque del Gobierno en el marco de un “cambio de época”.
DCN/Agencias