Un ciudadano denuncia irregularidades en la actuación policial que lo involucra.

El 28 de octubre, alrededor de las 10:30 a.m., se llevó a cabo un operativo en la casa N° 173 de la calle Ricaurte, en el barrio 23 de Enero, donde funcionarios del CICPC ingresaron sin una orden judicial, según el relato de Raymer José Aguirre. Aguirre, quien trabaja como chofer de autobús en la línea La Coromoto-Terminal Central de Maracay, declaró que los agentes llegaron en vehículos particulares y se identificaron con sus carnets.

El ciudadano afirmó que fue víctima de este procedimiento, indicando que fue agredido al momento de su detención. “Yo estaba en la casa y llegaron los PTJ (CICPC) y me entraron a pingazos y me llevaron para la PTJ”, expresó Aguirre. Durante más de 48 horas, permaneció detenido en la sede del CICPC en la Delegación Municipal Mariño, siendo investigado por el delito de “tráfico de municiones”.

El 30 de octubre, el Juzgado Noveno de Primera Instancia en Función de Control del Circuito Judicial del estado Aragua emitió una orden de excarcelación, permitiendo la liberación de Aguirre. Al salir en libertad, Aguirre rechazó las acusaciones en su contra, afirmando que era falso que hubiera sido detenido por hurto de viviendas. “Me presentaron por municiones de alto calibre, lo cual no tenía nada que ver”, concluyó.

Este caso se suma a otros recientes donde las actuaciones de las fuerzas de seguridad han sido cuestionadas por sus métodos y procedimientos.

DCN/Agencias