El canciller de Venezuela, Yván Gil, emitió un comunicado en el que el país manifiesta su rechazo a las recientes sanciones impuestas a 21 funcionarios del Gabinete. En el documento, se describen a estos individuos como “patriotas” que han trabajado para garantizar la paz, la estabilidad, la recuperación económica y la unidad nacional frente a la violencia que, según afirman, es inspirada y financiada por Washington, en contra de la voluntad del pueblo venezolano.
Gil caracterizó las nuevas medidas como un acto desesperado de un gobierno «decadente y errático», que intenta ocultar su fracaso electoral y la profunda crisis social que atraviesa el país mediante esta nueva agresión al pueblo. En la lista de sancionados figuran militares, ministros y otros funcionarios vinculados al Gobierno.
Además, el comunicado argumenta que estas sanciones no fomentan la democracia en Venezuela, sino que, por el contrario, buscan sostener a un grupo fascista que carece de respaldo popular, para extender su fracasada política de cambio de régimen.
El texto concluye afirmando que la República Bolivariana de Venezuela, fiel a su historia de lucha y soberanía, reafirma que el pueblo de Bolívar y Chávez no será vencido, y que su enfoque hacia la consolidación de la paz y la estabilidad política, económica y social es irreversible.
DCN/Agencias