En un centro comercial de Caracas, se pueden encontrar pantalones por 40 euros, cosméticos a partir de 10 euros y una promoción de dos camisetas por 20 euros. Esta es la realidad del comercio en la Venezuela multimoneda, donde el dólar ha sido la moneda más utilizada, especialmente durante la crisis hiperinflacionaria que ocurrió entre 2017 y 2021. Sin embargo, en el último trimestre, el euro ha comenzado a ganar terreno, apareciendo como la divisa en la que algunos comercios reflejan sus precios.
Los vendedores basan sus cálculos en la tasa del euro proporcionada por el Banco Central de Venezuela (BCV), para determinar los pagos en bolívares, la moneda local. Algunos restaurantes en Caracas han optado por mostrar los precios en euros, y los pagos en bolívares se convierten a la tasa oficial correspondiente.
En uno de estos establecimientos, aunque los clientes pueden pagar en euros, esta moneda se acepta al mismo precio que el dólar, a pesar de que hay una diferencia de 2,69 bolívares entre ambas divisas en el mercado oficial. Catherine García, una ejecutiva de ventas, comentó que le cobraron en euros, lo cual le pareció inconsistente y decidió no efectuar la compra.
El euro también se ha establecido como una referencia para el cálculo de multas en Caracas, especialmente en el municipio Libertador, donde ciertos delitos son penalizados basándose en su cotización oficial, de acuerdo con una ordenanza municipal.
DCN/Agencias