OpenAI anunció el viernes un plan para reestructurar su organización, indicando que creará una corporación de beneficio público (PBC) que facilitará la captación de capital y levantará ciertas restricciones que su actual matriz sin fines de lucro impone.
La propuesta contempla que la unidad con fines de lucro del creador de ChatGPT se transforme en una PBC en Delaware, diseñándose de tal manera que se tomen en cuenta tanto los intereses de la sociedad como el retorno para los accionistas. Por su parte, la organización sin ánimo de lucro tendrá un «interés significativo» en la nueva PBC, con participación accionaria que se determinará mediante asesores financieros independientes, como se menciona en un blog de OpenAI, describiéndola como una de las “organizaciones sin ánimo de lucro mejor financiadas de la historia”.
OpenAI inició operaciones en 2015 como una entidad sin ánimo de lucro orientada a la investigación, pero en 2019 estableció una rama con fines de lucro para poder financiar los altos costos asociados al desarrollo de inteligencia artificial, según información de Reuters.
Esta estructura inusual ha sido objeto de atención mediática, especialmente el año pasado, cuando Sam Altman fue despedido temporalmente como CEO, generando una fuerte reacción entre los empleados que exigieron su regreso.
Ante la creciente demanda de inversión en un campo tan competitivo como la inteligencia artificial general, que busca superar la capacidad humana, OpenAI ha implementado cambios estructurales para asegurar financiación. Su más reciente ronda de inversiones de 6 mil 600 millones de dólares, valorando la empresa en 157 mil millones, está condicionada a la posibilidad de transformar su modelo corporativo y reducir las limitaciones de beneficios para los inversores.
Con información de Reuters.
DCN/Agencias