Una gran multitud se reunió este sábado 7 de diciembre frente al Parlamento de Corea del Sur para exigir la renuncia del presidente Yoon Suk Yeol. Esta movilización coincide con la votación sobre una moción impulsada por la oposición que busca forzar su salida tras la declaración de ley marcial realizada esta semana.
La Policía estima que alrededor de 150.000 personas asistieron a la protesta, aunque los organizadores afirman que la cifra podría alcanzar el millón, según la agencia de noticias Yonhap. Adicionalmente, se llevó a cabo una manifestación de apoyo a Yoon, aunque con una participación mucho menor.
Mientras los manifestantes vigilaban el desarrollo de la sesión en el Parlamento, se dio inicio a la votación para destituir a Yoon. Para que esta moción prospere, es necesario que al menos la mitad de los 300 diputados participen y que al menos 200 estén a favor.
El Partido del Poder Popular, al que pertenece Yoon, anunció que no apoyará la moción y muchos de sus diputados se ausentaron de la sesión para evitar participar en la votación. El presidente de la Asamblea Nacional, Woo Won Shik, intentó sin éxito convencer a los legisladores de su partido para que regresaran y lograran el quórum, aunque un pequeño grupo decidió volver, recibiendo aplausos de los presentes.
Por otro lado, el partido en el poder participó en una votación anterior sobre la investigación de la primera dama, Kim Keon Hee, por presunta manipulación de acciones de una empresa importadora de automóviles y su influencia en candidaturas electorales. No obstante, esta propuesta no avanzó al lograr únicamente 198 de los 200 votos necesarios, con 102 diputados votando en contra, a pesar de que algunos miembros de la bancada oficialista rompieron la disciplina del partido.
DCN/Agencias